Waymo cree que el futuro de los vehículos autónomos depende de las asociaciones con los fabricantes. Fue por eso que la filial de Alphabet se asoció con Chrysler y Jaguar, y ahora está buscando expandirse por Europa y Asia, gracias a un acuerdo con la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi.
«Esta es una oportunidad ideal para que, de la mano de un socio innovador, la compañía lleve su tecnología autónoma a un escenario global», sentenció el CEO de Waymo, John Krafcik. Hasta hoy circunscrita a las fronteras de Estados Unidos, la fórmula será llevada en primera instancia a Francia y Japón.
En el pasado, la sociedad con Chrysler y Jaguar implicó para la firma hermana de Google equipar sus productos con hardware de conducción autónoma, para su uso en pruebas y el servicio de viajes compartidos Waymo One.
En contraste, un comunicado de prensa de la alianza franco-niponano no mencionó ajustes en sus modelos Renault Clio ni Nissan Leaf, sino que la exploración conjunta de «asuntos comerciales, legales y regulatorios relacionados con las ofertas de transporte sin conductor en Francia y Japón».
«Transporte sin conductor» puede significar cualquier cosa, desde viajes compartidos, como el servicio Waymo One que opera actualmente en el área metropolitana de Phoenix, hasta servicios de entrega y cualquier otro uso comercial que las empresas puedan pensar para vehículos autónomos.
Como sea, se espera que los primeros de producción guiados por inteligencia artificial se utilicen en servicios como estos. En lugar de poner un automóvil autónomo en la puerta de tu casa, oficina o lugar de estudios, es probable que sea mejor convocarlo a través de una aplicación para teléfono inteligente.
Centrarse en los servicios comerciales en lugar de las ventas minoristas tiene algunas ventajas. Por ejemplo, les da control total a los fabricantes sobre cómo se usan o mantienen sus autos, asegurando que los propietarios descuidados no causen problemas al empujar a los vehículos más allá de sus límites para los cuales fueron diseñados.
Los carros autosuficientes deberán mostrar un impecable registro de seguridad para generar confianza pública. Administrarlos de manera estricta ayudará a garantizar que las compañías puedan desplegar autos solo donde la tecnología funcione de manera óptima. Los servicios compartidos y de reparto también podrían proporcionar nuevas fuentes de ingresos para las casas automotrices.
Sin embargo, las regulaciones relativas a los autos sin conductor y los servicios que probablemente los usarán son bastante vagos, lo que explica el plan de Waymo y Renault-Nissan para auscultar el mercado primero.
Los servicios de viajes compartidos como Uber y Lyft han experimentado un retroceso por parte de los reguladores debido a las preocupaciones sobre la congestión del tráfico y las quejas de los taxistas sobre una competencia supuestamente desleal. Además de asegurarse de que los carros autosuficientes estén listos para enfrentarse al mundo real, las empresas deben asegurarse de que el entorno esté listo para ellos.
Renault y Nissan ya tienen sus propios programas de desarrollo automovilístico. Ambos fabricantes están adoptando un enfoque gradual de la tecnología, comenzando con el despliegue del sistema de asistencia al conductor ProPilot Assist de Nissan, en modelos como Altima y Rogue.
La fórmula de la nipona combina el control de crucero adaptativo con el centrado automático de carriles, pero está lejos de ser un verdadero manejo autónomo. Sin embargo, Renault y Nissan planean lanzar un sistema con un mayor nivel de automatización en 2020, seguido de carros totalmente autónomos en 2022.