Antes de que finalice 2019, Volvo incluirá entre los opcionales de sus vehículos una nueva cámara en el habitáculo no para avistar el camino, sino para apuntar directamente hacia el conductor. Al menos, así se desprendía de una entrevista concedida por el director digital de la compañía, Atif Rafiq, a la revista especializada británica Car.
La idea, que parece sacada de programas de reality show como Gran Hermano, se encuentra en desarrollo en la sede de Volvo, pero no está tan cercana como lo planteó el medio europeo. El fabricante sueco se contactó con Digital Trends para aclarar qué hace y qué no está haciendo con las cámaras su departamento de Investigación y Desarrollo.
«Atif Rafiq está analizando qué pueden hacer en el futuro las tecnologías de la cámara en términos de seguridad, como la detección de atención. Sin embargo, Volvo Cars no tiene ningún plan para cámaras orientadas al conductor o características relacionadas para este año», sentenció a través de un correo electrónico Stefan Elfström, portavoz de la filial del grupo chino Geely.
El representante añadió que la cámara en el automóvil solo está en la etapa de concepto, y es posible que no aparezca en el futuro cercano en un vehículo de producción.
Originalmente, Rafiq había presentado la iniciativa como otra característica que Volvo podía agregar a sus autos para hacerlos más seguros. El prototipo que mencionó monitorea regularmente las estadísticas vitales del conductor y toma medidas preventivas si detecta que algo anda mal.
“(Las cámaras orientadas hacia el conductor) están muy avanzadas en estos días: pueden determinar los niveles de glucosa de un conductor al observar sus pupilas, por lo que el sistema bien podría llamar a un ser querido u hospital si detecta un problema de salud. Los autos entenderán su estado y lo liberarán de estrés al regresar del trabajo”, explicó Rafiq en una entrevista con la revista Car.
En aquella ocasión, Rafiq señaló que la cámara también podría permitir a Volvo agregar la tecnología de reconocimiento facial a sus autos, desde los modelos más pequeños de la línea 40 hasta los modelos insignia de la gama 90.
“Tu automóvil te reconocerá y configurará sus aplicaciones de Google, control de clima y posición de asiento. Será muy inteligente», señaló.
Apuntar una cámara a la cara del conductor crea obvios inconvenientes de privacidad. Volvo ha probado esta tecnología durante años y predice que los conductores finalmente aprenderán a confiar en el dispositivo cuando aparezca en los vehículos de serie. Es más: cree que será aceptado como otro integrante de la red tecnológica que hoy conforman teléfonos, tabletas y computadores.
El director digital de Volvo hizo hincapié en que las imágenes recopiladas por la cámara serían anónimas y que la firma no las compartiría con las autoridades ni con entidades como las compañías de seguros. Eso sí, lo que la empresa sueca hará con ellas y los datos que recoja es una incógnita.