A pesar del exitoso lanzamiento del cohete Falcon Heavy de SpaceX, no todo es miel y rosas los reinos de Elon Musk. Tesla presentó los resultados financieros del cuarto trimestre y de todo el año 2017 ayer miércoles 7 de febrero, informes que muestran la mayor pérdida trimestral en la historia de la compañía. No obstante, Tesla afirma que podrá cumplir con sus objetivos de producción previamente establecidos para 2018.
Tesla registró ingresos récord ($3.3 mil millones), impulsados por los depósitos de sus clientes para su nuevo camión y su deportivo Roadster. Pero el fabricante de aún perdió $771 millones en el cuarto trimestre. Tesla también informó de un flujo de caja libre negativo de $276.7 millones, y una pérdida neta de $2.24 mil millones en 2017. En 2016, Tesla reportó una pérdida neta de $ 773 millones.
Esta pérdida trimestral (adicional) subraya la necesidad de que Tesla aumente la producción del Model 3. Recordemos que Tesla entregó solo 1,550 de estos en 2017, debido a diferentes “cuellos de botella” en la producción. Musk ha dicho que quiere que Tesla fabrique unos 500,000 autos al año a partir de este 2018, y se espera que el Model 3, más asequible, constituya la mayor parte de esa producción.
Tesla dijo que está en camino de cumplir con su objetivo previamente establecido de fabricar 5,000 automóviles por semana para finales del segundo trimestre. Ese hito ya ha sido retrasado dos veces. Tesla dijo en julio de 2017 que produciría 5,000 automóviles a la semana para fines de ese año, y luego dijo que alcanzaría ese objetivo a fines del primer trimestre de 2018. En enero, Tesla ya había citado el segundo trimestre de 2018 como nuevo objetivo.
Tesla tuvo $787 millones en gastos de capital durante el cuarto trimestre, lo que estuvo por debajo de sus proyecciones, pero dijo que el gasto sería «un poco más alto» este año, según Reuters. El fabricante de automóviles anticipa gastos para ampliar la capacidad de producción en su planta de ensamblaje en Fremont, California, y su planta de baterías «Gigafactory» de Reno, Nevada, así como para el trabajo de desarrollo en el Camión Semi, el nuevo SUV Model Y, y una nueva fábrica en China.
Gracias a la robusta demanda del Model S y Model X, Tesla pudo hacer entrega de 103,122 autos en 2017. Es un aumento significativo sobre los aproximadamente 76,000 automóviles que entregó en 2016, y es la primera vez que Tesla entrega más de 100,000 autos en un año. Pero los resultados financieros muestran que 2017 fue un año dulce y a la vez amargo para el fabricante de automóviles del que más se habla en todo el mundo.