Los conductores de vehículos tradicionales a gas tuvieron que experimentar largas horas en las gasolineras, si es que encontraban una abierta. Pero también fue una experiencia incierta para los propietarios de automóviles eléctricos, quienes estaban preocupados por quedarse sin potencia antes de llegar a su destino.
Sin embargo, en medio de la estresante situación, algunos propietarios de vehículos Tesla recibieron una agradable sorpresa de parte del fabricante de automóviles, con el objetivo de darles una mano para ayudarles a salir de la zona de peligro.
El sábado pasado, Tesla lanzó una actualización de software que aumentó la capacidad de la batería de algunos sedanes Model S y Model X SUVs. Todos los autos que recibieron la actualización pertenecían a personas que vivían en las regiones identificadas como áreas de evacuación por los funcionarios de emergencia, según señala el Washington Post.
La actualización fue realizada en tiempo real, y amplió la gama de los vehículos mediante el desbloqueo de la batería extra. En términos prácticos, esto significa que los autos que la recibieron podrían ir más lejos con una sola carga.
Tesla vendió previamente los modelos S y X con un paquete de baterías de 75 kWh, pero dio a los propietarios la opción de sólo 60kWh o 70kWh de energía. De esta manera, se podía comprar un vehículo más barato y tener la opción de pagar la potencia extra en una fecha posterior.
En medio de la situación relacionada al huracán Irma, un cliente le pidió a Tesla el acceso a la actualización de software para que pudiera evacuar más fácilmente, confirmó un portavoz de Tesla a Business Insider, y se supone que esa petición dio lugar a que todos los propietarios de Tesla que se encuentren en el área afectada por el huracán pueden obtener la actualización gratuitamente, siempre que tengan la base Model S y Model X.
Interesantemente, este cambio no será permanente, pues Tesla dijo que la actualización es temporal por las razones humanitarias de fuerza mayor, y será revertida el 16 de septiembre, presumiblemente una vez que el peligro inmediato haya pasado.
