Con Tesla Motors y su CEO Elon Musk atrapados en una especie de torbellino mediático por los problemas de lanzamiento del Model 3, algunos analistas e inversionistas del mercado están convencidos de que el próximo y revolucionario proyecto de la compañía, el camión Tesla Semi, está muerto.
No por nada, Tesla no mencionó al Semi durante su controvertida declaración de ganancias del primer trimestre, como bien señala SeekingAlpha. Algunos inversores y analistas dudan de la capacidad de Tesla para cumplir con sus promesas. Otros creen que Tesla está generando un “efecto de humo y espejos» para recaudar más capital, todo mientras oculta la verdad existente detrás de sus problemas internos. Musk incluso dio a entender que el Semi no es su prioridad en este punto.
«En realidad, no sé cuántas reservas tenemos para el Semi. ¿Aproximadamente 2,000? Bueno. Quiero decir, realmente no hemos intentado vender el Semi. No significa un esfuerzo constante de ventas, por lo que las órdenes [de venta] para Semi [simplemente] ocurren: las compañías se nos acercan. Sí, no es algo en lo que realmente pensemos mucho», le dijo a Phil LeBeau de CNBC.
Hace un año, imaginábamos a Tesla haciéndose cargo de la industria del transporte por carretera con su revolucionario semirremolque completamente eléctrico. El camión más nuevo de Tesla no solo se despediría del diésel, sino que resolvería muchos de los problemas de la industria del transporte por carretera y de una manera transformadora. Pero la duda y el escepticismo se han instalado bastante temprano.
Desde el punto de vista de la industria, el Semi parecía un poco (bastante) alejado de la realidad de los camiones grandes, una industria particularmente devota de la simplicidad. Aunque los pedidos iniciales de PepsiCo, Anheuser-Busch, Sysco y UPS supuestamente apuntan a un total de 315 pedidos (algunos de otras compañías establecieron cierta confianza en el proyecto), los analistas dicen que esa cantidad todavía no es suficiente.
Los problemas —o mejor dicho, dudas— con el Tesla Semi han surgido al mismo tiempo que los problemas de control de calidad y de fabricación del Tesla Model 3, después de perder los objetivos de ventas iniciales debido a «problemas de producción». Poniendo sal en la herida, surgió una reciente demanda de otra empresa emergente llamada Nikola Motor, que afirma que Tesla violó varias de sus patentes con su concepto Semi.
El cambio, especialmente cuando está orientado hacia la electrificación completa sobre el probado y súper-probado motor diesel tradicional, es increíblemente difícil de implementar. Esto es especialmente sensible para la industria del transporte por carretera, que depende en gran medida de la simplicidad y la facilidad de mantenimiento, así como de una infraestructura de combustible altamente desarrollada. En comparación con los camiones diesel tradicionales de hoy en día, un camión EV sería —simplemente— demasiado costoso, demasiado complejo para mantener, y con una infraestructura de recarga considerablemente menor a la infraestructura de combustible diesel.
En general, puede que la idea del Tesla Semi fuese demasiado optimista y algo alejada de la realidad del transporte por carretera. ¿El resultado? Pues que, por ahora, el Tesla Semi sigue siendo (casi) un sueño imposible.