Tuvimos la oportunidad de manejar por una semana el Honda Civic Coupé en su versión Touring del 2016. Recibimos un auto en color rojo intenso, con interiores en piel de dos colores, negro y crema. Cabe mencionar que el auto en cuestión es la gama más alta de la línea Civic.
Las primeras impresiones son de auto compacto deportivo, el color rojo ciertamente ayuda, al subir los interiores son más de un auto de lujo que de un deportivo. La piel da una sensación de calidad y los terminados son espectaculares.
Relacionado: Restauran completamente el primer Honda vendido en los EE.UU.
Dicen que el amor nace de la visión, y este auto nos “enamoró” a primera vista.
Después de encenderlo, uno encuentra con un panel de instrumentos central en LED, aunque solo la parte central es modificable, luce muy vistoso en color azul, flanqueado por dos agujas análogas para temperatura y nivel de gasolina.
El infotainment es un pantalla de siete pulgadas en donde el conductor tiene básicamente tres opciones: usar el sistema nativo de Honda, u optar por el Apple CarPlay o Android Auto. Nosotros optamos por el Android Auto conectado a nuestro Google Pixel XL.
Cabe mencionar que encontramos un falla en el sistema nativo de Honda. Al recibir mensajes de texto la pantalla se quedaba congelada y se volvía inservible. Pudo ser por la compatibilidad de nuestro teléfono, o por el sistema en sí, aunque no lo sabemos con precisión.
Aunque toda la tecnología nos atrae, los autos se compran por el motor, y la potencia. Y aquí nos encontramos con un 4 cilindros en línea turboalimentado que genera 174 caballos de fuerza, no lo más potente del mercado, precisamente. Aún así, la máquina se siente cómoda y silenciosa en el manejo normal, aunque es otra historia cuando el auto se pone en modo sport y se empujan los límites del sistema motriz.
Ahí el motor se vuelve ruidoso y un poco simulando motor pequeño, aunque las respuestas del acelerador fueron favorables con un torque de 162 lb-ft. Pero ciertamente, no tiene el sonido de máquinas más grandes.
Cuenta con una transmisión continua variable o (CVT), y no encontramos ningún tipo de problemas con ella al alcanzar velocidades altas.
A pesar de todo esto, el manejo es agradable, y su tecnología ayuda muchísimo a la venta, especialmente con los millennials, que buscan siempre que sus autos sean una extensión de un mundo que gira alrededor del celular.
El modelo probado fue la versión más alta, como ya se mencionó. Y aunque se trata de un auto compacto, no tiene un precio precio accesible, precisamente: $26,960, ciertamente, no se trata de una opción para «primer auto» o «carro de jóvenes estudiantes», aunque el precio base comienza en los $19,150. Seguramente el mercado está enfocado a profesionales jóvenes que necesitan algo que se vea y se sienta deportivo por debajo de los $30,000 dólares.
Como cuenta con tan solo dos puertas, no podemos considero como un modelo familiar, los asientos traseros no son precisamente muy cómodos, y el entrar y salir de ellos se vuelve algo complicado… Pero ya se mencionamos que se trata de un Coupé, diseñados para sentar a dos personas cómodamente.
La cajuela es suficientemente amplia para poner equipaje de dos personas.
En conclusión, es un buen auto para necesidades específicas. Lo imaginamos en manos de jóvenes recién salidos de la universidad y con manejos no muy largos para el trabajo, aunque también puede ser una buena opción para los amantes de Tuning.