Hace dos años, Aston Martin destinó 200 millones de libras esterlinas (casi 275 millones de dólares) en fondos adicionales de su compañía matriz e inversionistas para crear su concepto DBX. Hasta ahora, no estaba claro cuándo llegaría a la línea de montaje el primer crossover del fabricante de automóviles del Reino Unido, aunque los amigos de Autocar han reunido nuevos detalles sobre este modelo, incluyendo su fecha de producción, programada para 2019.
Desde el momento en que Andy Palmer se unió a Aston Martin como CEO en 2014, su mensaje ha sido claro: «Si Aston Martin quiere sobrevivir, debe fabricar un SUV».
El DBX representa el primer intento serio de Aston de convertirse en un fabricante de automóviles más convencional, yendo tras un público objetivo más amplio. Considerado como el primer vehículo familiar Aston Martin, la versión de producción del crossover adoptará un estilo de carrocería de cinco puertas, con una línea de techo más larga y “menos coupé” que el DBX Concept. Se espera que la fascia delantera pase a la producción con sólo algunas pequeñas modificaciones.
Una nueva arquitectura de aluminio, con elementos extraídos de la plataforma DB11, apoyará también al DBX. Al igual que aquél, el DBX estará propulsado por una selección de motores con dos turbocompresores. Los modelos base usarán el V8 biturbo de 4.0 litros de Mercedes-AMG con 503 caballos de fuerza y 498 libras-pie de torque. Los modelos mejorados emplearán el nuevo V12 de doble turbo de 5.2 litros de Aston, el cual produce 600 caballos y 516 libras-pie de torque.
En un momento, se sugirió que el tren de potencia totalmente eléctrico del concepto DBX haría su paso a la producción, pero Aston Martin ha vuelto a considerar sólo una disposición híbrida convencional. Lo más probable es que el motor AMG se acoplará a uno o a varios motores eléctricos para dar una potencia aún mayor que el V12.
Al menos tres nuevos modelos adicionales se unirán al DBX; Aston Martin se ha embarcado en la mayor expansión de modelos en sus 102 años de historia. Palmer explica que la producción de sus autos como el Vantage siempre se limitará a 7,000 unidades, esto con el fin de conservar el sentido de exclusividad que buscan sus compradores. Pero los modelos con un atractivo más convencional como el crossover son necesarios para garantizar la existencia de la empresa a largo plazo.
Se espera que el primer crossover de Aston Martin llegue a los concesionarios para 2020. Cuando salga a la venta, tendrá que defenderse de la competencia de un número creciente de off-roaders de lujo, incluyendo el Bentley Bentayga, el Rolls-Royce Cullinan, y el Lamborghini Urus.
¿Qué hará que el DBX sea único? «No se ha sacrificado la belleza para lograr su practicidad o rendimiento», asegura Palmer.