En medio de la crisis de muertes por sobredosis de fentanilo que atraviesa Estados Unidos, y que ha cobrado la vida de varios menores de edad que adquirieron el opioide en redes sociales, Snapchat anunció medidas para evitar que los narcotraficantes puedan ofrecer sus productos a adolescentes que usan la app.
Snap, compañía matriz de Snapchat, dijo que la medida de mayor calado será desactivar la función Quick Add, que permitía a una persona agregar a otro usuario basado en un algoritmo de recomendación y que, según investigaciones periodísticas, facilitó a los narcotraficantes contactar a menores de edad para venderles píldoras de fentanilo.
Ahora, Snap dice que la función solo estará disponible para los usuarios que tengan “cierto número de amigos en común” con el usuario que desean contactar, y por defecto, estará desactivada para usuarios menores de 17 años.
Jacqueline Beauchere, directora de Seguridad de Snap, subrayó que “Snapchat no es ideal para encontrar a nuevas personas” y que más bien “fue diseñada para comunicarse con personas que ya conoces, con tus amigos del mundo real”.
No obstante, una investigación publicada por NBC News reveló que al menos ocho jóvenes y adolescentes murieron por sobredosis de fentanilo al adquirir píldoras del opioide sintético mediante narcotraficantes que los contactaron en Snapchat.
Samuel Chapman, padre de un menor de 16 años que murió de sobredosis de fentanilo, pidió mecanismos más enérgicos, pues dijo que “todas esas medidas son fáciles de burlar para los narcotraficantes y los niños”.
“Lo que veo es que Snapchat anuncia una medida tras otra, pero al final del día todavía puedes comprar drogas en línea en unos cuantos segundos”, señaló.
Pese a las críticas, Snap defiende que la plataforma cuenta con herramientas que permiten encontrar, de manera proactiva, 88 por ciento del contenido relacionado a la venta de drogas. El resto, dijo, es denunciado por usuarios de la red social.