En los últimos años, los drones controlados a distancia se han vuelto más populares y útiles para las personas, especialmente en los Estados Unidos, y por eso, cada vez es más común ver o escuchar estos dispositivos voladores en el aire y ya no tener que asustarte pensando que un platillo volador extraterrestre.
Sin embargo, es importante tomar en cuenta que pilotear un dron es una gran responsabilidad y manejarlo bajo los efectos del alcohol u otras sustancias que alteren tu comportamiento es bastante inseguro tanto para ti como para las otras personas alrededor. Y así mismo lo piensa la asamblea estatal de Nueva Jersey.
Por eso, en un intento por frenar los vuelos irresponsables en Nueva Jersey, los legisladores de la asamblea estatal votaron recientemente para aprobar una ley en la que se considere un delito ofender a un dron bajo la influencia de bebidas o drogas, la cual fue aprobada con una arrolladora participación de 65-0 y además fue promulgada por Chris Christie, en su último día como gobernador de Nueva Jersey.
La ley afirma que volar un dron «bajo la influencia de un licor intoxicante, un narcótico, alucinógeno o droga que produzca hábito o con una concentración de alcohol en la sangre de 0.08% o más en peso de alcohol» podría llevar al piloto a seis meses de prisión, una multa de $1,000 dólares o ambas penalizaciones, dependiendo de los detalles del incidente.
Además, se ha confirmado que, en estos momentos, otros 38 estados de los EE. UU. están considerando imponer una prohibición similar.
Por su parte, la asambleísta demócrata Annette Quijano, quien contribuyó a impulsar el proyecto de la nueva ley en Nueva Jersey, informó recientemente en un comunicado, que los drones se están volviendo «cada vez más perturbadores, causando casi accidentes con aviones, interfiriendo con operaciones de bomberos y siendo utilizados para contrabandear drogas y hasta otras sustancias en las prisiones «.
Asimismo, Quijano agregó: «Este proyecto de ley establece pautas específicas sobre cómo los residentes de Nueva Jersey pueden utilizar estos dispositivos para establecer algún orden y ayudar a prevenir estas situaciones peligrosas».
No obstante, la ley también detalla que interferir con los bomberos o la seguridad de las prisiones, será considerada una ofensa más grave que los conductores borrachos, y, además, podría provocar un castigo de 18 meses en la cárcel o una multa de $10,000 dólares. Así que ya sabes, aléjate lo más que puedas de la prisiones o estaciones de bomberos ¡es mejor prevenir que lamentar!
A pesar de que no hemos escuchado muchas historias famosas de pilotos ebrios piloteando su dron, una que si fue de gran revuelo público fue el incidente que ocurrió con un dron cerca de la Casa Blanca en el 2015. ¿Lo recuerdas?
Según los informes, un trabajador de la agencia de inteligencia del gobierno fuera de servicio y borracho decidió que las 3 am sería un buen momento para volar un quadcopter Phantom 4 desde el balcón del departamento de un amigo. Pero al no poder controlar la máquina, ésta se estrelló justo en el césped de la Casa Blanca, causando un gran susto al departamento de seguridad de la presidencia.
