Que el gobierno británico prohíba la publicidad de vehículos deportivos utilitarios (SUV) tal como erradicó, en su momento, los anuncios realizados por la industria del tabaco.
Eso es lo exige, a través de un informe, un grupo de expertos medioambientales del The New Weather Institute y de la organización climática Possible, informó BBC News.
Esgrimen que la tendencia creciente que han mostrado los consumidores hacia los SUV está impulsada por una agresiva publicidad por parte de la industria automotriz.
Temen que esta tendencia al alza, que se registra también a nivel mundial, ponga en peligro los objetivos climáticos del Reino Unido.
El país lleva a cabo un ambicioso plan de descarbonización del transporte con el que se espera alcanzar una meta de cero emisiones para 2050.
La realidad es que cuatro de cada 10 autos nuevos que se comercializan en el país son SUV. Por su parte, los vehículos totalmente eléctricos representan dos de cada 100.
En una campaña denominada “Badvertising”, los autores del informe quieren prohibir la publicidad de modelos de automóviles con emisiones promedio de más de 160 gramos de CO2/km, y que superen los 4,8 m de longitud.
Desde el sector automotor se defienden. Un representante de la industria destacó que los SUV modernos son los más limpios de la historia y que muchos pueden funcionar con baterías.
Pero los autores del informe señalan que los motores eléctricos no resuelven todos los problemas que acarrean los SUV.
Aseguran que este tipo de vehículos contaminan el aire con partículas que se desprenden de los frenos y de los neumáticos. Además, acusan a los fabricantes de autos eléctricos de ocupar fuentes contaminantes para elaborar las baterías.
Afirman, además, que los SUV de grandes dimensiones representan una molestia, especialmente, en los espacios de estacionamiento.
Andrew Simms, uno de los creadores del informe, señaló: “terminamos la publicidad del tabaco cuando entendimos la amenaza del tabaquismo para la salud pública Ahora que conocemos los daños que la contaminación de los automóviles produce en la salud humana y en el clima, debemos detener anuncios publicitarios que empeoren el problema”.
La profesora Jillian Anable, de la Unidad de Estudios de Transporte de la Universidad de Leeds, va más allá.
“Deberíamos estar pensando en prohibir la venta de autos grandes y contaminantes en el mercado del Reino Unido. Nuestra investigación muestra que si se eliminan progresivamente, a partir de ahora, será más fácil llegar a la meta de cero emisiones en los próximos 10 a 15 años”.