Las mascotas son para muchos parte de la familia. Pero, ¿qué te parecería tener un perro robot… sin cabeza? Pronto eso será posible gracias a Boston Dynamics.
Los últimos avances de la tecnología son sin duda impresionantes, y en el campo de la robótica, demuestran qué tan lejos han llegado las máquinas en un corto espacio de tiempo. Un claro ejemplo son los robots de Boston Dynamics.
Si quedaste asombrado al ver el robot sin cabeza parecido a un perro, llamado SpotMini, cuando te lo presentamos el noviembre pasado, tal vez terminaste un tanto asustado al ver su última versión, que viene con una nueva extremidad extensible que es tan versátil como extraña. El diseño más reciente de SpotMini parece incorporar sensores en la parte frontal y lateral de su cuerpo, que lo ayudan a interactuar con su entorno.
Y ahora, estamos un paso más cerca de poder ver la acción de este robot de cerca y de manera personal. Después de casi tres décadas, Boston Dynamics finalmente comenzará a vender sus robots, empezando precisamente con el SpotMini. La disponibilidad comercial está programada para el 2019, según un anuncio del fundador Marc Raibert en el evento de de TechCrunch TC Sessions: Robotics en UC Berkeley.
«La creación del robot SpotMini se motivó pensando en los robots que podrían estar presentes en una oficina, en un espacio más accesible para las aplicaciones de negocios, y luego, en el hogar», dijo Raibert en el escenario.
Se dice que el SpotMini es el «robot más silencioso construido por Boston Dynamics». Su peso es de 66 libras y puede funcionar alrededor de 90 minutos con una sola carga de su batería. La compañía ya ha contratado a fabricantes para que construyan 100 SpotMinis durante los siguientes meses, y luego escalará la producción para que puedan vender unidades a partir del próximo año. Aunque aún no se sabe nada sobre el precio, la compañía ha dicho que el prototipo de SpotMini es 10 veces menos costoso que su hermano mayor.
En el primer video de SpotMini, publicado en el 2016, se muestra al robot original realizando varias tareas en la casa, como cargar el lavavajillas y tirar la basura. También se muestra que resbala en la cáscara de un plátano, lo que sugiere al menos una forma en la que los humanos podríamos defendernos contra cualquier ataque de robots.