Junto al lanzamiento de la Xbox Series S y Xbox Series X en 2020, llegó una tarjeta SSD de Seagate de 1 TB para aumentar el almacenamiento de las consolas. Y este 21 de octubre de 2021, Microsoft anunció nuevas opciones de las mismas tarjetas, que ahora estarán disponibles en formatos de 512 GB y 2 TB.
Las nuevas tarjetas son fabricadas por Seagate y, más allá de su capacidad de almacenamiento, funcionan exactamente igual a las originales de 1 TB: se conectan en la ranura de expansión de memoria de las consolas y se integran a la arquitectura llamada Xbox Velocity, que permite velocidades de transferencia de datos muy altas.
La tarjeta de 512 GB tendrá un precio de $139 dólares, mientras que la versión de 2 TB llegará a $399. Ambas se comenzarán a vender primero en Estados Unidos vía Walmart; la más pequeña se lanzará a mediados de noviembre, mientras que la más grande abrirá su preventa en el mismo mes para entregarse a principios de diciembre.
Microsoft planea llevar estas nuevas tarjetas a otros mercados, aunque por ahora no entregaron más detalles al respecto y solo se limitaron a decir que habrá que revisar la disponibilidad de ellas con los distribuidores locales.
El almacenamiento externo de la Xbox no se limita solo a estas tarjetas. Por defecto, la consola soporta discos mecánicos externos que se conectan vía USB 3.0 y que permiten almacenar juegos e incluso ejecutarlos sin moverlos a la SSD interna.
Sin embargo, esto último solo se puede hacer con los títulos de generación anterior y no con los optimizados para las Series S y Series X, debido a que esa optimización gira alrededor de la SSD interna y ultrarrápida de las consolas. Por ende, la única forma de ampliar la SSD es por medio de tarjetas de expansión de Seagate, que pueden resultar muy útiles en la Xbox Series S, ya que su capacidad interna es de solo 512 GB.