De todos los nombres que se esperan en E3, Elden Ring es uno de los que más expectativas genera. Fue anunciado hace bastante tiempo —diciembre de 2019— y desde entonces poco se ha sabido al respecto.
Esa suerte de misterio no es extraña, más si se toma en cuenta que en la industria de los videojuegos es frecuente. Pero aún así, los proyectos anteriores de From Software y su director estrella no han estado tan ocultos como este juego.
Los por qué respecto a lo anterior son varios, pero antes de tratar de entenderlos, sirve un pequeño resumen a modo de contexto. Elden Ring es el siguiente gran proyecto de Hidetaka Miyazaki, director japonés que ha estado detrás de títulos insignes como toda la saga Dark Souls, Bloodborne y Sekiro: Shadows Die Twice. Dichos productos tienen estatus de culto por haber redefinido un formato de juego que se sale de los cánones.
Elden Ring, en el papel, dará un par de pasos importantes respecto a los otros juegos del estudio. Lo primero es que será de mundo abierto; ninguno de los anteriores lo fue, y el solo hecho de ser una aventura no lineal es un cambio respecto a los Souls.
El otro punto llamativo es la asociación de From Software con George R.R. Martin, autor de Song of Ice and Fire (y por consecuencia, el mundo de Game of Thrones), para construir el universo narrativo de Elden Ring. Entonces, esta trilogía de elementos —Hidetaka Miyazaki, George R.R. Martin y un mundo abierto—, hacen del nuevo proyecto algo demasiado llamativo como para mantenerse tras bambalinas tanto tiempo.
Y sin embargo así ha ocurrido. Bandai Namco, la compañía que lo publica, por lo general no es de las que anuncia los juegos para no volverlos a mostrar jamás hasta su estreno. Ninguno de los tres Dark Souls ha pasado por periodos de oscurantismo en cuanto a información, sino todo lo contrario: una vez anunciados, se comparten nuevos datos de manera constante y nunca queda en el aire la idea de que el proyecto pase por algún tipo de problemas.
¿Por qué con Elden Ring parece que sucede lo contrario? Una de las hipótesis es que el juego se anunció de manera demasiado anticipada. La presentación en los Game Awards de 2019 fue nada más que un tráiler conceptual en el que se explicó a grandes rasgos la mitología en la que se basa y la ambientación. Es posible entonces que, con el proyecto en fase muy inicial, el timing de esa presentación no haya sido el correcto.
Otra hipótesis es que el juego haya tenido algún tipo de problema durante el desarrollo. Hasta ahora, y de acuerdo a la información que existe, los títulos recientes de Miyazaki se han completado en el tiempo establecido y sin mayores problemas que impliquen algún tipo de retraso. Pero a la vez, tanto Bloodborne como los tres Dark Souls eran juegos muy similares entre sí en términos de formato. En tanto, Sekiro es un juego aún más lineal y menos complejo en su diseño, pues no es un RPG sino de acción directa.
En cambio, Elden Ring es un juego de mundo abierto y eso implica desafíos no menores. Desde el punto de vista tecnológico, este tipo de productos necesita gestionar de manera muy particular el acceso a datos por el hecho de no seguir un camino predefinido ni estar separado en niveles individuales. From Software es un estudio muy talentoso, pero este diseño más abierto requiere un ajuste tecnológico; ya ha ocurrido en otros estudios, donde el proceso resulta un poco tortuoso.
Existe también una tercera hipótesis, que tiene que ver con el historial de retrasos de George R. R. Martin con sus obras. Sin embargo, esta no tiene mucho asidero, más si se considera que Elden Ring estará escrito por Hidetaka Miyazaki, tal como los títulos anteriores. Martin colaboró en la construcción del universo, pero no es —al menos de manera oficial— el autor del guion o la historia del juego.
Suena factible que la falta de información respecto a Elden Ring tenga que ver con cuestiones relativas al desarrollo y a la idea que quiere implementar From Software. El juego se comenzó a trabajar en 2017 y tal vez 2019 era el momento para mostrarlo, pero la falta de información posterior más allá de un tráiler interno filtrado en marzo (y que se ve arriba de este párrafo), no se explica dentro del contexto natural de un anuncio de este tipo. Y esto hace pensar que el proyecto pudo haber sufrido algún retraso que se manejó de manera privada.
Pero en E3 2021 todo podría cambiar. Bandai Namco tendrá una presentación el próximo martes 15 de junio y aquel podría ser el momento perfecto para que Elden Ring se presente de nuevo en sociedad. Y así quede en el olvido el año y medio en el que no se supo nada del juego.