Una compañía de arquitectura piensa que las gasolineras del futuro se podrían ver muy diferentes a las actuales.
Charging Tower es un concepto creado como una idea de lo que podría reemplazar a las gasolineras en un futuro, donde se espera que los vehículos eléctricos sean más populares. Ennead Lab, la rama de investigación de Ennead Architects, con sede en Nueva York, creó una de estas torres de carga para una nueva área de desarrollo urbano en Shanghai.
Con sus múltiples niveles que apilan autos eléctricos, la torre de carga se asemeja a una estructura de estacionamiento más que a una gasolinera, pero según sus creadores ese precisamente es el punto. Cargar un coche eléctrico tarda mucho más que llenar un tanque de gas, pero Ennead espera utilizar eso como una ventaja. La torre ocupa un espacio relativamente pequeño, lo que le permite ajustarse a zonas urbanas densas dando a los conductores alternativas de distracción o de trabajo mientras esperan a que sus autos se carguen.
La torre de carga Charging Tower también puede acomodar a los conductores que tienen más prisa. Incluye opciones tanto para la carga estándar como para una «supercarga» más rápida (un nombre con el que Tesla probablemente no está muy contento). De forma análoga a las estaciones de carga rápida como los Superchargers de Tesla, estas estaciones se encuentran en el nivel del suelo para que los automóviles puedan entrar y salir rápidamente. Las estaciones de carga más lentas se alojan en los niveles superiores de la torre.
Con dos velocidades de carga, la torre puede ser útil para los conductores que estén haciendo una breve parada en un viaje largo, o los que se desplazan a nivel local, dice Ennead. Los conductores locales pueden ser capaces de permitirse el lujo de esperar más, y pasar el tiempo mientras pasean, comen o van de compras. Los conductores de larga distancia probablemente usarán la torre de carga más como una gasolinera tradicional, deteniéndose sólo el tiempo suficiente para recargar la energía que necesitan antes de continuar su viaje.
Si bien no está claro si las ciudades del futuro estarán llenas de torres de carga para vehículos eléctricos, el cambio de la forma de combustión interna que cada vez es más prevalente podría tener un gran impacto en las infraestructuras. Las estaciones de carga se pueden instalar dondequiera que se encuentren líneas eléctricas, brindando una alternativa práctica a los conductores.