Neuralink, la empresa de implantes cerebrales de Elon Musk, realizó un cambio importante en los últimos días. Su cofundador Max Hodak anunció que ya no es parte de la compañía.
Uno de los detalles importantes de esta salida es que el propio Hodak la dio a conocer en su cuenta de Twitter. Sin embargo, parece no haber enemistad alguna en el asunto, ya que las palabras del expresidente son solo halagos y asegura que seguirá dando todo su apoyo, aunque ahora desde fuera.
✨Some personal news:✨ I am no longer at Neuralink (as of a few weeks ago). I learned a ton there and remain a huge cheerleader for the company! Onward to new things.
— Max Hodak (@maxhodak_) May 1, 2021
No está claro en qué pueda afectar la salida de uno de los fundadores a la compañía, pero al menos las noticias recientes sobre el trabajo de Neuralink no hacen sospechar de cambios. El más reciente hito de la empresa de Musk fue lograr que un mono juegue al mítico Pong! al controlar el juego gracias a un chip insertado en su cerebro.
Sin embargo, el año pasado aparecieron algunos cuestionamientos a la forma de operar de Neuralink. Un reporte de 2020 del sitio Stat News reveló algunas prácticas que tenían algo descontentos a los empleados, en particular, ciertos conflictos relacionados al ritmo tradicionalmente pausado de los descubrimientos científicos, que terminaron chocando con la cultura de avances más rápidos que propone Elon Musk.
En dicho reporte, algunos exempleados dijeron que el clima laboral en Neuralink era “caótico” y que en el conflicto entre científicos e ingenieros, Elon Musk se puso del lado de los segundos. A causa de esto, varios de los científicos que estuvieron con Neuralink en sus comienzos terminaron por renunciar a la compañía.
Está por verse si este reciente cambio afectará al futuro de Neuralink como compañía. Quién sabe si, luego de su salida, se cumple uno de los deseos de Max Hodak: la creación de un Jurassic Park en la vida real.