Ikea y Sonos presentaron de manera oficial su colaboración más reciente. Se trata de un altavoz integrado en una lámina decorativa cuyas características ya se habían filtrado a comienzos de mes.
Básicamente, se trata de un atractivo marco blanco o negro que oculta el gran altavoz que se puede colgar en la pared, como si fuera un cuadro.
El dispositivo incorpora ilustraciones frontales intercambiables que se pueden ajustar al diseño en ambos colores, lo cual hace que el altavoz sea personalizable, una característica que siempre valoran los usuarios.
De acuerdo con Ikea, los diseños corresponden a la artista Jennifer Idrizi. No obstante, su disponibilidad dependerá del país o la región.
Ambas compañías dejaron en claro que no se trata solo de un tema estético, ya que este dispositivo, aseguran, ofrece una alta calidad de sonido, además de que puede ubicarse de una manera diferente a los altavoces tradicionales “sin sacrificar la calidad”.
Este nuevo aparato de la familia Symfonis admite todas las funciones de la aplicación Sonos para smartphones, entre ellas el acceso a Sonos Radio y Apple AirPlay 2, pero no cuenta con Bluetooth.
El altavoz Symfonisk de Ikea mide 55 centímetros de alto, 40.64 centímetros de ancho y 5.08 de profundidad. Sus dimensiones son como las de una lámina decorativa clásica. Los controles se ubican en la parte posterior del lado izquierdo del marco.
Este dispositivo estará disponible el 15 de julio en América del Norte y Europa por un precio de $199 dólares, y podrá ser adquirido en tiendas físicas y en la página web de Ikea.