Si alguna vez recibiste una factura de calefacción inesperadamente alta, probablemente estarás interesado en conocer el HouseZero Project de la Universidad de Harvard. Este proyecto se está llevando a cabo actualmente en Cambridge, Massachusetts, y tiene un ambicioso objetivo: crear un edificio autosostenible que produzca más energía de la que consume.
Al escuchar la descripción, tal vez uno se imagine una construcción con arquitectura futurista, similar a alguna de las nuevas sedes de los gigantes de la tecnología en Silicon Valley. Sin embargo, lo que hicieron los investigadores de Harvard junto a la firma de arquitectura Snohetta y Skanska Technology es todo lo contrario, al adaptar una vieja casa construida antes de los años 1940, que servirá como la nueva sede del Centro de Harvard para Edificios y Ciudades Verdes.
La idea es demostrar un modelo transferible de re-equipamiento que podría aplicarse a millones de casas residenciales similares que existen actualmente en los Estados Unidos. Esto contrasta con el pensamiento convencional de que niveles similares de eficiencia energética sólo pueden desarrollarse como parte de una nueva construcción.
El proyecto HouseZero cuenta con una gran variedad de características ingeniosas. Estas incluyen la reducción de la necesidad de iluminación eléctrica mediante la creación de nuevas y ampliadas ventanas y claraboyas, diseñadas para proteger los espacios interiores de la luz directa del sol en el verano, y al mismo tiempo aprovechar el calor del sol durante el invierno. Esto significa, por supuesto, la necesidad de un enfriamiento mínimo en los calurosos meses de verano, mientras que en los fríos meses de invierno tampoco se requeriría mucha calefacción.
La calidad del aire y los niveles de confort en la casa son monitoreados permanentemente, con la ventilación controlada a través de algoritmos inteligentes y sensores de sala que son responsables de abrir y cerrar ventanas.
La casa también presenta una chimenea solar, diseñada para generar movimiento térmico y atraer el calor desde el sótano hacia las áreas principales del edificio. Además, se espera que la energía generada por los paneles fotovoltaicos sea suficiente, no solo para las necesidades de la casa, sino también para vender el excedente de energía a la red eléctrica de la ciudad.
En cuanto a materiales y diseño interior, la casa consta de áreas abiertas, tabiques de separación transparentes, y vigas de madera expuestas, contrastando con el diseño antiguo original. Tal vez podrías sentirte un poco como si estuvieras viviendo en una tienda de Apple.
De todas formas, si el proyecto HouseZero sigue adelante como lo tienen planeado y sus objetivos de reducción de costos de energía son alcanzados, es probable que más casas como ésta aparezcan en los Estados Unidos en un futuro no muy lejano.