No hay día sin sol ni semana sin que Elon Musk suelte algún comentario polémico. El hombre más rico del mundo asegura que no tiene casa propia y que duerme en los sofás libres que le prestan sus amigos. Musk hizo estas declaraciones en una entrevista con Chris Anderson, jefe de organización de la conferencia TED.
“Si viajo al Área de la Bahía, que es donde está la mayor parte de la ingeniería de Tesla, voy rotando por las habitaciones libres de mis amigos”, dice el ejecutivo ahora accionista mayoritario de Twitter.
Musk, cuyo patrimonio neto estimado es de $251,000 millones de dólares, contó esta anécdota después de que Anderson le dijera que muchos se sienten ofendidos por el concepto de multimillonario debido a las disparidades en el reparto de la riqueza. Legisladores estadounidenses como la senadora Elizabeth Warren también han criticado a los megamillonarios como Musk por pagar impuestos bajos.
“Esto sería un gran problema si estuviera gastando miles de millones de dólares al año en consumo personal, pero ese no es el caso”, le dijo Musk a Anderson. El magnate agregó que no posee un yates, ni toma vacaciones, pero tiene un avión privado para ahorrar tiempo en sus desplazamientos.
No es la primera vez que escuchamos hablar sobre el desarraigo de propiedades de Musk. El año pasado, el fundador de Tesla anunció su decisión de vender todos sus bienes inmuebles con el fin de acumular todos los recursos posibles para sacar adelante su iniciativa de colonizar el planeta Marte con SpaceX.