En años recientes, un gran número de cráteres ha aparecido en la superficie de Siberia. Se trata de agujeros gigantescos, algunos de ellos de varios metros de profundidad, que han provocado curiosidad entre los científicos y los lugareños.
El primero de estos surgió en 2014; desde ese momento, las autoridades han registrado la aparición de más de 20 cráteres.
Según los investigadores son explosiones de gas que provienen del permafrost. Por ahora, la zona más afectada parece ser la península de Yamal. La buena noticia es que, hasta el momento, no se ha registrado ninguna víctima fatal por esta extraña situación.
Varias ideas
Las primeras teorías que surgieron indicaban que se podía tratar de meteoritos, pero esto pronto fue descartado, más después del estudio y análisis de los cráteres.
También se pensó que la culpable podía ser la extracción de combustibles fósiles en la región, pero esta idea nunca pudo ser comprobada.
Ahora, un nuevo estudio señala que el cambio climático provocaría la aparición de estos cráteres.
De acuerdo con la investigación, todo comienza con la acumulación de gas natural en el interior de la Tierra, lo que es un fenómeno habitual.
Al mismo tiempo, las altas temperaturas debilitan el permafrost, lo que ha ocurrido en los últimos cinco años en el Ártico y Siberia; incluso se han registrado temperaturas de hasta 48 grados Celsius en el círculo polar ártico este verano.
Lo anterior ha permitido que el permafrost se derrita, lo que provoca que los gases interiores tengan mayor facilidad para ejercer presión y salir a la superficie. La forma que tienen para hacerlo es a través de explosiones que dejan un enorme agujero en la tierra.
Los investigadores también señalan que es probable que esta situación solo ocurra en las penínsulas de Yamal y de Gydan, que son los dos territorios en el mundo que reúnen las condiciones geológicas necesarias para que ocurra este fenómeno.