Los especialistas en robots Boston Dynamics han compartido un video festivo con Spot, su cuadrúpedo robótico parecido a un perro.
«¡Esperamos que tengan una temporada navideña edificante!», dice el equipo de robótica en un mensaje que acompaña a la parodia de 90 segundos, y agrega: «Spot fue teleoperado por operadores profesionales, no intentes esto en casa».
El video muestra a Spot 1 llevando un gran lazo rojo que claramente quiere colocar encima del árbol de Navidad. Pero incluso cuando está completamente extendido, y usando su brazo robótico, Spot 1 no puede alcanzar ese alto.
Entra en el Spot 2 y el Spot 3, que se organizan en una especie de plataforma a la que sube el Spot 1. Los puntos 2 y 3 luego extienden sus patas a su rango completo, poniendo la parte superior del árbol al alcance del punto 1.
Luego, el robot usa su brazo para agarrar el arco antes de colocarlo cuidadosamente en la parte superior del árbol.
Es una demostración impresionante de la versatilidad de Spot, y también un ejemplo inquietante de cómo los robots pueden trabajar juntos para lograr un objetivo. Sin embargo, cualquiera que tema un levantamiento de Spot definitivamente debería ver el video completo, ya que el final sorpresa sugiere que cualquier tipo de toma de control por parte de este robot en particular no llegará muy lejos (todavía no, de todos modos).
A pesar del calamitoso final, Spot es claramente un kit impresionante. De hecho, desde 2020, Boston Dynamics ha estado comercializando la máquina a empresas que desean usarla para automatizar tareas como inspecciones, monitoreo y mapeo.
El gigante automotriz Ford probó el perro robot desde el principio, usándolo para escanear una de sus plantas de producción, que puede cambiar con el tiempo sin ser documentada.
Los funcionarios de Ford quedaron impresionados por la capacidad de Spot para manejar escaleras y terrenos irregulares, y también por la velocidad a la que funcionaba.
En los últimos años, el robot también ha sido visto en otros roles, incluyendo ayudar a médicos y pacientes en Boston, trabajar como perro pastor en Nueva Zelanda y bailar en un juego de béisbol en Japón.