Un grupo de investigadores realizó un singular hallazgo en la Reserva Natural Powdermill, en Pensilvania.
Se trata de un extraño espécimen de picogrueso pechirrosa (Pheucticus ludovicianus) considerado por los científicos como una criatura mitad macho y mitad hembra.
Usualmente, esta ave presenta plumas de color amarillo y marrón en las hembras y de color rosado y rojizo en los machos. Sin embargo, el ejemplar recientemente descubierto presenta ambas características.
Según los investigadores, esta particularidad se debería a una anomalía genética conocida como ginandromorfia bilateral, que ya se ha documentado en otras aves y especies de mariposas.
No es como el hermafroditismo, que hace referencia a poseer tejidos reproductores masculinos y femeninos. Los ginandromorfos evidencian características sexuales contrastantes en cada lado del cuerpo.
Así, el ave descubierta presenta un lado genéticamente femenino, mientras que el otro lado muestra las características de un macho genético.
Los investigadores también explican que esta división de izquierda a derecha podría afectar su interior, incluido su cerebro y sus órganos reproductivos, al igual como ya se ha descubierto en otros ginandromorfos.
Luego del hallazgo, el grupo de profesionales encargado evidenció todo su entusiasmo.
“Todo el equipo estaba muy emocionado de ver de cerca una rareza tan grande y están disfrutando de esta experiencia única en la vida. Uno de ellos lo describió como ver un unicornio y otro describió la adrenalina de ver algo tan extraordinario”, explicó la investigadora Annie Lindsay.
Este descubrimiento es sorprendente e inusual, de hecho, en los 64 años de historia de esta reserva se han encontrado menos de diez aves ginandromorfas.
Una vez que se recolectaron evidencias y se grabó un video, los investigadores decidieron dejar libre a este pájaro para que regresara a la naturaleza y se uniera a la migración de otoño.