En periodos eleccionarios es cuando más abundan las noticias falsas y los datos imprecisos, que terminan causando confusión en el electorado e incluso son usadas deliberadamente como herramientas para incidir en las votaciones políticas.
Muchos de los problemas del fact checking de estos discursos han apuntado a las redes sociales, que han sido acusadas de beneficiar y ayudar a la proliferación de fake news.
Por eso, Twitter está dando un paso adelante y quiere evitar que su plataforma contamine el discurso público y anunció que está trabajando en una plataforma de verificación de datos para los tweets de políticos.
Según información recogida por NBC News, «la función agrega insignias rojas y naranjas a los tuits que la compañía ha considerado «engañosamente dañinos», seguidos de información de verificadores verificados y periodistas».
Esto potencialmente hará pensar tres veces a los políticos qué tuitean y qué comunican, porque estarán muy expuestos a que periodistas y verificadores los dejen al descubiertos como mentirosos.
«Estamos explorando varias formas de abordar la información errónea y proporcionar más contexto para los tweets en Twitter», dijo un portavoz de la compañía de Jack Dorsey. «La información errónea es un problema crítico y probaremos muchas formas diferentes de abordarla».
La idea de Twitter además es que los usuarios comunes y corrientes participen de esta verificación, para eso, todos aquellos que contribuyan de buena manera y con datos precisos y «proporcionan un contexto crítico para ayudar a las personas a comprender la información que ven», podrían ganar insignias destacadas y puntos en la plataforma.
Eso además esperan en la red social del pajarito, alejaría a los trolls y a personas con intereses políticos torcidos a manejar mensajes en la comunidad.
«Juntos, actuamos para ayudarnos mutuamente a comprender lo que está sucediendo en el mundo y protegernos de aquellos que nos separarían», dice la demostración de Twitter, que además aclaró que, «esta es una maqueta de diseño para una opción que implicaría comentarios de la comunidad».
En esta demostración además se pregunta a los miembros de la comunidad si un tweet es «probable» o «poco probable» que sea «perjudicialmente engañoso», lo que dejaría expuestos a los políticos.