Facebook comenzará a dar a ciertos usuarios la posibilidad de reclamar la propiedad de sus imágenes y administrar dónde aparecen, tanto en esta red social como en Instagram.
La idea es que la actualización de la plataforma de gestión de derechos llegue en el futuro a todos los usuarios, tal como ocurre en la actualidad con los derechos de música y videos.
La compañía no entregó detalles sobre quiénes serían los primeros usuarios en acceder a esta función, ni tampoco un cronograma detallado sobre cuándo se ampliará al resto de la red social.
La medida permitiría que si una empresa carga una imagen de su autoría en el administrador de derechos de Facebook, se podría monitorear dónde aparece, incluyendo cuentas de Instagram, según The Verge.
De esta forma, si lo estima conveniente, una empresa podría reclamar la eliminación de las fotografías que están siendo usadas sin autorización —lo que borra la publicación infractora completamente— o solicitar un bloqueo territorial.
“Una herramienta como esta es bastante sensible y muy poderosa, y queremos asegurarnos de contar de que las personas puedan usarlo de manera segura y adecuada”, explicó Dave Axelgard, gerente de Productos de Experiencia para Creadores de Facebook, al mencionado sitio.
Cómo reclamar
Los usuarios que deseen proteger una fotografía deberán cargar en el Administrador de Derechos de Facebook un archivo CSV, donde están contenidos los metadatos de la imagen.
Además, deben especificar en qué lugares se aplican los derechos de autor.
Cuando el administrador de derechos de Facebook identifique coincidencias entre una imagen y una publicación, se abrirá una disputa.
Según detalló Facebook, el reclamo será cedido a quien haya ingresado la información en primera instancia.
Cambios en Instagram
La actualización tendría como propósito fomentar la publicación de fotografías originales en Instagram, donde actualmente solo se etiqueta como crédito al titular de los derechos, como en los repost.
Según The Verge, la medida podría ser especialmente llamativa con los memes, que suelen ser editados en múltiples ocasiones.
Según Axelgard, están comenzando con un grupo pequeño para «aprender más y descubrir la forma adecuada de abordar casos de uso específicos como los memes».