Uno de los mitos quizás más extendidos respecto al coronavirus es que los adultos jóvenes son casi inmunes a la enfermedad y que no presentan cuadros tan graves en caso de contagiarse.
Sin embargo, una carta de investigación publicada el miércoles 9 de septiembre en la revista JAMA Internal Medicine, es uno de los estudios más completos sobre este segmento etario y el COVID-19.
Un análisis de 3,222 adultos jóvenes entre 18 y 34 años hospitalizados con coronavirus indicó que:
- 21 por ciento requirió cuidados intensivos.
- El 10 por ciento requirió ventilación mecánica.
- 2.7 por ciento murió.
Lo que básicamente encontró la investigación es que todos los adultos jóvenes de ese segmento y que cayeron en hospitalización, en su gran mayoría no tuvo buen pronóstico.
Jonathan Cunningham es el primer autor de la carta de investigación y miembro de cardiología en el Brigham & Women’s Hospital y la Facultad de Medicina de Harvard, y entrega una perspectiva sobre los resultados de la investigación.
«Los adultos jóvenes deben saber que todas las personas, independientemente de la edad, corren algún riesgo de sufrir un resultado grave de Covid-19», dice Cunningham. «Especialmente cuando los colegios y universidades se reinician, los adultos jóvenes deben ser conscientes de los riesgos de COVID-19 y tomar las precauciones adecuadas para protegerse de la infección».
Algunos datos interesantes del estudio
- La edad promedio de este grupo fue de 28 años.
- Aproximadamente el 57.6 por ciento de los pacientes eran hombres.
- El cincuenta y siete por ciento eran afroamericanos o hispanos.
- El 36,8 por ciento tenía obesidad, el 24,5 por ciento obesidad mórbida (con un índice de masa corporal (IMC) superior a 40 kilogramos / metro cuadrado), el 18,2 por ciento diabetes y el 16,1 por ciento hipertensión, afecciones que se han relacionado con resultados graves en otros estudios.
Mitchell Katz, presidente y director ejecutivo de NYC Health + Hospitals comentó que, «si bien los adultos jóvenes tienen muchas menos probabilidades que las personas mayores de enfermarse gravemente, si llegan al punto de la hospitalización, sus riesgos son sustanciales», explica Katz. «Covid-19 es una enfermedad potencialmente mortal en personas de todas las edades. El distanciamiento social, el cubrimiento facial y otros enfoques para prevenir la transmisión son tan importantes en los adultos jóvenes como en las personas mayores».