- Internet estable y potente
- Fácil configuración
- App móvil que podría ser más intuitiva
La casa pasó de ser un lugar para descansar y entretenerse a un espacio dedicado de manera preponderante a la productividad. Ello condujo a que los usuarios hicieran todo tipo de adecuaciones —desde comprar una cámara web para videoconferencias hasta adquirir una silla de escritorio más cómoda— con el propósito de responder de la mejor manera a la nueva realidad. Los que necesitaban mejorar su conexión wifi local, seguro voltearon a ver desde extensores hasta sistemas tipo malla. Dentro de estos últimos, tuvimos la oportunidad de probar por un par de semanas el TP-Link Deco M4, por lo que aquí están nuestras primeras impresiones.
Antes, vale la pena saber qué es un sistema de malla o mesh. Se trata de un router que se conecta al módem del proveedor de internet, lo cual le da la capacidad al primero de comunicarse con otros routers distribuidos en otras habitaciones. La ventaja es que no se crean varias redes inalámbricas, sino una sola que se extiende por todos los rincones. En otras palabras, el usuario no tiene que preocuparse por buscar aquella que le dé mejor cobertura en un cuarto determinado.
Su nombre obedece a que cada router funciona como un nodo de una gran malla, la cual no solo contribuye a tener una señal más potente, sino estable.
En el caso del producto que probamos, en el paquete de compra vienen dos routers —cualquiera se puede conectar al módem principal—, aunque es posible escoger una opción con más elementos o añadir más en el futuro.
Primeros pasos
Antes de conectar cualquier dispositivo, es necesario descargar la aplicación TP-Link Deco, desarrollo móvil que lleva de la mano con la intención de configurar cada uno de los componentes del sistema de malla.
El paquete de compra viene con un cable Ethernet, que es el que permitirá conectar cualquiera de los routers de la firma china al módem. También se incluyen los eliminadores que alimentan de energía a estos.
Una vez configurado el router principal, la aplicación preguntará si se quiere añadir otro. En nuestro caso, dijimos que sí.
Lo que se debe tener en cuenta es que un solo equipo puede fortalecer considerablemente la red inalámbrica en un mismo piso de dos o tres habitaciones. Para casas de varios niveles, tal vez será necesario considerar, por lo menos, un router adicional para cada uno.
¿A qué nos referimos con “fortalecer”? Un ejemplo: mientras que el módem del proveedor de internet nos ofrecía lo básico para el streaming, una velocidad de 10 Mbps —incluso al no estar tan alejados de este—, la red creada por el sistema de TP-Link nos proporcionó 48 Mbps, número que se mantenía aun cuando nos separábamos del router principal. La velocidad final puede ser superior, pero depende del paquete de internet que se tenga.
Lo interesante es que esa velocidad se replica en los diferentes nodos (routers) distribuidos en los distintos niveles del hogar —en nuestro caso, planta baja y primer nivel—, lo que crea esa sensación de malla o red única.
Diferencias con un extensor
Hemos probado algunos extensores wifi y son varias las conclusiones que podemos sacar al respecto.
Un extensor también puede conectarse directamente al módem o de forma inalámbrica para ampliar la señal de manera considerable, no lo podemos negar.
Pero, como pasa con el módem, el extensor pierde potencia, sobre todo en las habitaciones más alejadas. Asimismo, la señal es menos estable, lo que puede ser un problema a la hora de hacer videollamadas en una recámara, por ejemplo.
Para aquellos que viven en un departamento con un par de habitaciones, la recomendación es optar por un extensor (son suficientes sus capacidades para un espacio así). Si se tiene una casa más grande o repartida en más de un nivel, lo ideal será un sistema de malla.
Otros beneficios de TP-Link Deco M4
El sistema mesh del fabricante chino, como otro de sus atractivos más sobresalientes, activa en la misma red las bandas de 2.4 y 5 GHz. Si bien esta última está menos congestionada, no todos los dispositivos son compatibles con la misma.
De este modo, el usuario no tendrá que cambiarse de red por la que sea más fuerte o compatible con su celular o computadora en cada una de las habitaciones; los Deco M4 lo hacen de manera automática.
Desde la aplicación móvil también se pueden ver todos los equipos conectados a la red, indicar qué dispositivos son de alta prioridad, añadir otros administradores y establecer el control parental, entre otras opciones.
“El control parental le permite filtrar el contenido, limitar el tiempo que se pasa en línea y verificar el historial de internet. Comience por crear perfiles únicos para los miembros de su familia”, se lee en la descripción de esta herramienta.
Según nuestra opinión, la app podría ser más intuitiva. Sin embargo, responde bien a las distintas necesidades de los usuarios, desde los que solo buscan ampliar la potencia de la red local hasta los que tienen hijos y quieren poner restricciones.
En conclusión, TP-Link Deco M4 es una opción más que viable, sobre todo si el hogar se convirtió en el centro de operaciones laborales o vio crecer de manera considerable el número de dispositivos con necesidad de conexión a la red de redes al mismo tiempo.