“Este altavoz es de lo mejor en su especie. Es resistente, duradero y fácil de transportar, pero además cuenta con varios aspectos positivos en cuanto al sonido”
- Diseño compacto y robusto
- Buena autonomía
- Certificación IP67
- Sin jack de audio
- No cuenta con ecualizador
La fama de los altavoces Bose es ampliamente conocida. La compañía estadounidense, fundada en 1964, lleva más de 50 años dedicada al sonido.
Así, en este análisis te contamos cuáles han sido nuestras sensaciones con el Bose SoundLink Flex, su altavoz portátil más reciente que tiene todo lo necesario para competir con los mejores de su clase.
Buena duración de batería, construcción robusta a prueba de agua y buenas especificaciones técnicas en términos de sonido son algunas de las bondades de este dispositivo. Vamos a verlo.
Diseño
El SoundLink Flex tiene un tamaño compacto y solo pesa 600 gramos. Su diseño alargado y la correa de tela ubicada a un extremo de su chasis hacen que sea muy cómo de transportar.
Para su construcción, Bose utilizó una silicona supersuave al tacto y una rejilla de acero con recubrimiento contra el polvo (el dispositivo tiene clasificación IP67 contra estas partículas y la humedad).
Si bien la bocina se puede mojar sin que tengamos miedo de que pase algo, no te recomendamos que la metas al agua.
El altavoz se puede colocar de manera vertical u horizontal. Además, en la parte superior están los controles para encender/apagar, el de emparejamiento Bluetooth, uno para subir/bajar volumen y un botón multifunción para reproducir/pausar y pasar de pista. Eso sí, no hay forma de realizar ajustes de ecualizador, ni siquiera desde la app de Bose.
Conectividad
Una de sus ventajas es que podemos usar Google Assistant o Siri para el control por voz, algo muy útil cuando llevaba el altavoz al baño: mientras me duchaba, podía pedirle que cambiara de pista o que me informara sobre el tiempo.
El dispositivo se empareja mediante Bluetooth de manera rápida y consistente, y como sucede con los auriculares Bose QuietComfort 45, cuando lo encendemos nos informa sobre el estado de la batería y nos dice a qué dispositivos está conectado.
Calidad de sonido y autonomía
Como mencionamos, no es posible ajustar el ecualizador en el SoundLink Flex, aunque en mi opinión no es algo importante en un altavoz portátil, ya que la calidad de sonido es buena con todos los géneros.
El parlante suena más grande de lo que realmente es y su reproducción de agudos es nítida y bien definida. Las frecuencias más bajas pueden sonar lineales en algunos casos, pero los graves son excelentes. Lo mismo sucede con las voces, donde se percibe bien tanto el timbre como la textura de las mismas.
En cuanto a la autonomía, Bose dice que es capaz de resistir hasta 12 horas de uso continuo. Como siempre, estas cifras dependerán de la calidad de la conexión Bluetooth del dispositivo al que se empareje y del volumen al que lo utilicemos. En mi caso, después de una semana de uso durante una hora al día y con el volumen a 60 por ciento, no he tenido que recargarlo. De hecho, aún sigue con 10 por ciento de carga.
La bocina no incluye cargador, así que la abastecí con uno de 65 W que tenía en casa. Con este voltaje tarda unas dos horas en llegar a 100 por ciento.
Conclusión
Este altavoz es de lo mejor en su especie. Es resistente, duradero y fácil de transportar, pero además cuenta con varios aspectos positivos en cuanto al sonido, entre ellos su buena respuesta de rango completo y la gran presencia de bajos.
Si buscas el mejor parlante portátil del mercado debes considerar el Bose SoundLink Flex como una de tus primeras opciones, pero no debes olvidarte de que carece de ajustes para ecualizar, además de que su precio es de $149 dólares (169 euros).