He recibido el temido correo: “Actualización sobre el uso compartido de Netflix entre distintos hogares”, el que habla del cargo extra por compartir la contraseña, en otras palabras. Lo recibí tres días después de que la plataforma oficializara su estrategia —el pasado 23 de mayo— en varios países de América, como Estados Unidos, Argentina, Colombia y México. La pregunta que inmediatamente vino a mi cabeza fue esta: ¿ahora sí es momento de cancelar Netflix?
Pagar una cantidad adicional por un miembro extra, como el servicio llama a alguien que usa la cuenta fuera del hogar principal, era inminente, sobre todo porque esta campaña inició en marzo de 2022 en ciertas naciones de Latinoamérica.
En este sentido, recopilamos algunos motivos que hacen pensar que es un buen momento para ponerle fin a la suscripción, sin dejar de mencionar puntos en los que realmente destaca la plataforma.
Razones para cancelar Netflix
La primera razón que puedo dar para cancelar Netflix es que desde hace mucho tiempo no me he enganchado con alguna de sus series.
Cierto, de pronto ha surgido una que otra propuesta que llama mi atención, como Bronca (Beef), la cual terminé en un solo fin de semana. Sin embargo, no se compara con la emoción que me han dejado realizaciones como Succession o The Last of Us, ambas de HBO. En el caso de la creación de Jesse Armstrong, cada domingo era una cita obligada para saber el destino de Logan Roy y sus singulares hijos.
Curiosamente, uno de los argumentos sólidos por parte de Netflix para cobrar por personas añadidas es ayudar a producir contenido de calidad. El asunto es que pocas de sus recientes realizaciones entran en esta categoría: la mayor parte solo es digna de ver una única vez, y ya es una exageración decir esto.
No poder pagar por todos los servicios de streaming, la realidad para la mayoría, es otra de las razones que motivan a cancelar Netflix, es decir, debe haber algunos sacrificados para quienes no están en la posibilidad de costear las distintas plataformas disponibles. Es entonces cuando las personas deben poner sobre la balanza qué tan enganchados están con determinadas producciones o si no usan una opción tanto como quisieran.
Esta razón está vinculada con la primera expuesta aquí. Así, si Netflix ya no causa tanta emoción por las distintas producciones con su sello, ¿por qué se debe mantener como un cargo mensual cada mes?
El otro gasto tiene que ver con el tiempo. Imposible que las personas destinen las horas que demandan los originales de un servicio, por ejemplo. Es entonces que alguien preferirá pagar (en tiempo y dinero) por una serie como Succession, porque sabe que sí la verá, en lugar de una película como La madre, cuyo principal atributo no es la historia en sí misma, sino el peso de la actriz protagonista, Jennifer López.
Una razón más que motiva a cancelar Netflix es el hecho de que la plataforma le pone a todos los que comparten su contraseña el mismo traje. Se olvida de que hay padres que sí pagan por el servicio, pero que no viven con sus hijos, o de amigos que contratan varias plataformas precisamente para contar con una mayor oferta de contenido (el problema ahora está para quien seleccionó la propuesta de Los Gatos desde un principio).
El compartir una contraseña no significa en automático lucrar con esa acción. Es simplemente sacarle mayor partido a una realidad en la que abundan las propuestas, sin caer en prácticas como la piratería o visualizar el contenido en modo clandestino, en otros sitios web.
Será interesante ver cómo se transforma el dato de 100 millones de hogares que comparten su cuenta Netflix. Con su cargo extra, puede que lo reduzca, sin embargo, también corre el riesgo de que incremente su número de cancelaciones.
Por último, parece excesivo el monto extra en sí mismo: 69 pesos por cuenta adicional en México (el plan Estándar tiene derecho a contratar una más, en tanto que el Premium, un par). En Estados Unidos, el cargo es por 7.99 dólares.
Falta decir que Netflix es ya una de las plataformas de streaming más caras del mercado. El pagar por el esquema Estándar y un miembro extra puede ser lo mismo que costear dos servicios diferentes, como Apple TV+ y HBO Max para el caso de México.
Para quienes estén de acuerdo con dos o tres razones de las expuestas aquí, el panorama no es confuso: es momento de cancelar Netflix. Y tal vez sea la señal más clara para decirle al servicio que obtener más recursos no debería estar ligado a la calidad de los contenidos y que el compartir la cuenta no debe verse como una medida tramposa de los usuarios. Por cierto, ¿alguien recuerda cuando a Netflix le encantaba que las personas compartieran su cuenta?
Razón para quedarse con Netflix
Sería injusto no dar ninguna razón para seguir manteniendo el servicio cofundado por Reed Hastings. Lo primero que debemos resaltar es que la plataforma de Los Gatos ya cuenta con sellos que levantan cierto interés, desde la misteriosa Stranger Things hasta la distópica Black Mirror, pasando por las populares Orange Is The New Black, Cobra Kai, Ozark, You y La casa de papel.
Lo otro es que Netflix puso los cimientos para lo que hoy conocemos como las modernas plataformas de video en streaming, además de que marcó la pauta para la creación de contenido original fuera de los grandes estudios de televisión. Todo eso ha provocado que tenga un gran conocimiento para construir una buena experiencia de usuario, una que se ha extendido incluso al terreno de los videojuegos.
Aun con todos los peros, es precisamente en la experiencia de usuario en la que se pueden conjuntar todos sus puntos buenos. La manera de mostrar el contenido y la capacidad de reproducir este sin interrupciones son características que las personas agradecen y más de un servicio del tipo envidia.