Un grupo de científicos de la Universidad de Cagliari encontró en 2019 en las aguas de Cerdeña en el Mediterráneo, un extraño espécimen de tiburón gato de boca negra Galeus melastomus, que fue documentado en el Journal of Fish Biology.
Con un problema grave de pigmentación, sin piel y sin dientes, este ejemplar hembra de 30 centímetros de largo y 82.7 gramos de peso ha logrado sobrevivir en esas condiciones.
Shark without skin or teeth pulled from Sardinia sea https://t.co/6zyWGTCZQP via @MailOnline
— Vickey Brickle-Macky (@FanXstitch) August 27, 2020
«Se informa el primer caso de falta de estructuras relacionadas con la piel (epidermis, estrato laxo , dentículos dérmicos y dientes). Aunque este tipo de anomalía morfológica es potencialmente fatal, las observaciones sugirieron que el espécimen estaba en buen estado de salud y bien desarrollado», indica la investigación.
Los científicos además «notaron que los dientes del escualo presentaban anormalidades notables, puesto que estaban «reducidos a una especie de estructuras no visibles a simple vista». Sin embargo, esta malformación no limitó su capacidad para cazar o alimentarse, dado que esta especie deglute a sus presas enteras.
Dentro de las causas para esta malformación, podría ser un problema de nacimiento, aunque las teorías también apuntan que podría estar relacionada con una larga exposición a contaminantes químicos o al aumento de la acidificación del mar producto del calentamiento global.
El equipo recibió el tiburón capturado en Cape Carbonara en el sur de Sardini en julio de 2019 a una profundidad de 1,640 pies debajo de la superficie, como informó IFL Science por primera vez.
«No está claro cómo la anomalía afecta el comportamiento, la fisiología o la ecología de este individuo», se lee en el documento.