El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, colocó un pedazo de roca lunar sobre el Despacho Oval apenas inició su administración en la Casa Blanca.
Pero, ¿qué significa esta roca lunar y por qué está en el Despacho Oval de Joe Biden? No es más que una declaratoria de intenciones.
De acuerdo con la NASA, la roca fue recolectada en 1972 por los astronautas de la misión Apolo 17, Ronald Evans y Harrison Schmitt y Eugene Cernan —los últimos humanos en pisar la Luna— y está colocada en el Despacho Oval como un reconocimiento simbólico a las misiones de los años sesenta y setenta, que marcaron el liderazgo de Estados Unidos en la carrera espacial. Pero, al mismo tiempo, son una muestra del compromiso del Gobierno de Estados Unidos con el programa de exploración espacial, que tiene como objetivos, primero, a la Luna, y más tarde, a Marte.
El primer paso del nuevo programa espacial de Estados Unidos está encabezado por Artemis, cuyo objetivo es volver a explorar la Luna, llevando nuevamente a un hombre, pero también, a la primera mujer, al polo sur de la Luna en 2024. Pero, ¿qué sentido tiene explorar un sitio ya conocido? Ni más ni menos que establecer la primera base humana fuera de la Tierra (reactor nuclear incluido), y desde la que, en algún momento, se prevé enviar humanos a Marte partiendo del principio de que, sin gravedad, se necesita menos combustible para despegar.
Esa es la razón por la que la roca de 332 gramos y clasificada por la NASA como la muestra número 76015,143, está a la vista del presidente Joe Biden.
Estados Unidos busca ratificar su liderazgo al frente de la exploración espacial en un momento en el que la otra superpotencia mundial, China, ha dado pasos agigantados en lo que respecta a sus avances espaciales. Pero pese a la competencia, Estados Unidos encontró en el excéntrico Elon Musk al aliado perfecto para concretar su ambicioso objetivo: llegar a la Luna para alcanzar Marte.