Con el incremento de productos alimenticios procesados, no es fácil conseguir alimentos naturales u orgánicos a precios razonables. Esa situación ya no solo está restringida a productos enlatados o cajas, sino que también a frutas, verduras, o productos de granjas, como huevos o carne.
Pero yendo un paso más allá, muchos opinan que el futuro de la comida está en proteínas cultivadas en laboratorios, aunque todavía “fabricar” carne es un proyecto no viable económicamente. Por ejemplo, cuando la compañía Memphis Meats anunció en abril que por primera vez había “producido” carne de pollo en un laboratorio, la firma admitió que el logro llegó a un costo de $9,000 dólares por libra. Es sin duda una mordida cara.
Pero esta semana, Memphis Meats dio a conocer una noticia que pone la situación en perspectiva y demuestra cuánto apoyo tienen los proyectos de carne cultivados en laboratorio.
Un grupo de líderes empresariales, entre ellos Bill Gates, Richard Branson y Kimbal Musk, se unieron a gigantes de la industria alimenticia y firmas de inversión, para respaldar la puesta en marcha de este proyecto. Para esto, trajeron a la mesa 17 millones de dólares en una serie de fondos de la Serie A. En total, Memphis Meats ha recaudado 22 millones de dólares.
“Creemos que este es un día muy importante para el futuro de las proteínas», dijo Steve Myrick, vicepresidente de desarrollo de negocios de Memphis Meats, a Digital Trends. «Esto marca el primer compromiso público con el movimiento de la ‘carne limpia’ por parte de los principales inversores, además de los líderes de la industria. Este anuncio también marca un momento importante en el que la industria de la carne y los grupos impulsados por la misión han venido bajo la misma carpa. Esta financiación está validando el espacio para la carne limpia, y Memphis Meats ahora se establece como el líder claro».
Sin embargo, cambiar la mentalidad general para aceptar carne que no venga de una granja sino de un laboratorio no puede ser tarea fácil. Además, la ambición de la empresa es grande, pero no está claro cuando un producto accesible estará disponible. Pero algo es seguro, según la compañía: la carne cultivada en laboratorio probablemente reduciría drásticamente las emisiones de carbono, de allí el nombre de ‘carne limpia’.
«Esta es una ocasión trascendental para cualquiera que quiera ver un sistema de alimentos seguro, bueno para el planeta y los animales, y completamente satisfactorio para los consumidores», dijo Bruce Friedrich, director ejecutivo de Good Food Institute, en un comunicado. «Memphis Meats está haciendo un trabajo increíble para hacer realidad esta visión. Estamos muy contentos de dar la bienvenida a un líder de la industria de la carne y creo que tienen un enorme potencial para apoyar y acelerar este trabajo. Para los defensores del bienestar animal y del medio ambiente, hoy es un gran paso adelante».