Este jueves 30 de enero, la Organización Mundial de la Salud (OMS) finalmente decretó alerta sanitaria global por la rápida propagación que está teniendo el coronavirus en China y en el mundo. Y así como se demoraron en generar esta alerta (básicamente para asegurarse del estado del brote), a principios de mes fueron vencidos por una Inteligencia Artificial (IA), que detectó con mayor precisión y más temprano la pandemia.
Bluedot se llama una plataforma de salud canadiense, que basada en un algoritmo con IA, logró predecir con nueve días de anticipación a la OMS y con seis días de anticipación al Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, el virus de Wuhan.
El aviso de hecho lo dio el 31 de diciembre de 2019, basado en informes de noticias globales, redes de enfermedades de animales y plantas, datos de boletos aéreos y anuncios oficiales para predecir y detectar posibles epidemias.
Kamran Khan, fundador y CEO de BlueDot, se refirió a esto en entrevista con la revista Wired.
«Sabemos que no se puede confiar en que los gobiernos proporcionen información de manera oportuna. Podemos recoger noticias de posibles brotes, pequeños murmullos o foros o blogs o indicaciones de algún tipo de eventos inusuales», comentó para explicar cómo iniciaron la detección, eso sí descartando el uso de información de redes sociales, por la baja precisión que éstas tienen.
El CEO de BlueDot explicó con más detalle cómo hacen el procesamiento de información, en una compañía que trabaja con 40 empleados y que revisa documentos en más de 65 idiomas antes de hacer cruces de datos.
«Lo que hemos hecho es utilizar el procesamiento del lenguaje natural y el aprendizaje automático para entrenar este motor para reconocer si se trata de un brote de ántrax en Mongolia frente a una reunión de la banda de heavy metal Anthrax», dice Kahn.
Los clientes a los que van estos informes son: el gobierno, la industria y la salud pública, así como aerolíneas y hospitales en las regiones afectadas.
Kamran Khan trabajó en 2003 en Toronto para la epidemia del virus SARS y compara ambas enfermedades.
«Hay un poco de deja vu en este momento. En 2003, vi cómo el virus abrumaba la ciudad y paralizaba el hospital. Hubo una enorme cantidad de fatiga mental y física, y pensé: ‘No volvamos a hacer esto'», sostuvo.