El creador del Proyecto Manhattan, que derivó en las bombas atómicas, Robert Oppenheimer, está de moda por estos días por el estreno de la película que cuenta su historia del director Cristopher Nolan. Y a partir de eso, ahora salió un relato sobre la posibilidad de que este afamado científico pudo haber descubierto los agujeros negros.
En la revista Scientific America, dicen que «Fue influyente; fue visionario», según la versión de Feryal Özel, astrofísico del Instituto de Tecnología de Georgia, sobre el trabajo de Oppenheimer sobre agujeros negros y estrellas de neutrones, los cadáveres superdensos de estrellas masivas caducadas. «Tiene un impacto duradero». Özel es miembro fundador de Event Horizon Telescope Collaboration.
«La breve incursión de Oppenheimer en la astrofísica comenzó con un artículo de 1938 sobre estrellas de neutrones, que continuó en una entrega de 1939 que incorporó aún más los principios de la teoría general de la relatividad de Einstein. Luego publicó un tercer artículo sobre agujeros negros el 1 de septiembre de 1939, pero en ese momento, apenas se notó porque este fue el mismo día en que Alemania invadió Polonia, lanzando la Segunda Guerra Mundial. Oppenheimer nunca volvió a escribir sobre el tema», comenta Scientific America.
El escrito más importante es el tercer artículo culminante de Oppenheimer, escrito con su estudiante Hartland Snyder, que explora las implicaciones de la relatividad general en las estrellas más masivas del universo. Aunque los físicos necesitaban incluir algunas suposiciones para simplificar la pregunta, determinaron que una estrella lo suficientemente grande colapsaría gravitacionalmente indefinidamente, y dentro de un período de tiempo finito, lo que significa que los objetos que ahora conocemos como agujeros negros podrían existir.
«Me pareció muy, muy interesante, fascinante y aterrador que tal idea estuviera allí durante 25 años, y nadie prestara atención», dice. «Eso significa que hoy podríamos tener una idea igualmente revolucionaria en este momento que la comunidad está ignorando», dice Manuel Ortega-Rodríguez, físico teórico de la Universidad de Costa Rica.