El cultivo de peces en la Luna no solo es posible, sino también física y mentalmente recomendable para los habitantes de una futura base lunar.
El plan sugerido por científicos franceses es criar peces en la Luna a partir de huevos enviados desde la Tierra y mediante agua recolectada en la superficie del satélite.
El Centro Espacial de la Universidad de Montpellier y el Instituto Francés de Investigación para la Explotación del Mar (IFREMER) realizaron la investigación con huevos de róbalo (lubina) y corvina (perca regia).
Los huevos fueron sometidos a instrumentos que vibraron y los sacudieron con el objetivo de recrear una experiencia similar a la de un viaje a bordo del cohete ruso Soyuz.
Según el estudio publicado en la revista Aquaculture International, los investigadores optaron por huevos en lugar de peces adultos, porque los consideraron más resistentes para el viaje.
Después de la experiencia, 76 por ciento de los huevos de róbalo y 95 por ciento de los de corvina eclosionaron. Las cifras son similares a las de huevos que no fueron sometidos a ningún estrés.
Aporte nutritivo y psicológico
“Fue una locura. El medio ambiente era muy duro para estos huevos”, afirmó Cyrille Przybyla, el científico e investigador principal de IFREMER, a la revista Hakki (vía Futurism).
Además de brindar la opción de disfrutar alimento más apetitoso que el envasado que se enviaría desde la Tierra, los investigadores creen que criar peces en el espacio podría ayudar a la salud mental de los astronautas.
“Desde el punto de vista psicológico, es mejor tener un recordatorio de la Tierra. Tienes un jardín, tienes un tanque con peces”, puntualizó Przybyla.
NASA Artemis