Astrónomos hallaron evidencias de que un agujero negro o una estrella de neutrones se abrió paso en espiral hacia el núcleo de otra e hizo que esta explotara como supernova, fenómeno que nunca antes había podido ser identificado.
Para este descubrimiento, el equipo a cargo utilizó datos del proyecto VLASS (Very Large Array Sky Survey) de observación del cielo, que tiene como uno de sus objetivos encontrar objetos transitorios.
Según los astrónomos de Caltech, lo normal es que las estrellas masivas exploten en forma de supernova cuando se agota su combustible nuclear, pero en este caso un agujero negro o una estrella de neutrones provocó que la estrella compañera se convirtiera en supernova antes de tiempo.
Este descubrimiento confirma por primera vez la generación de una supernova a partir de una fusión.
“Los teóricos habían predicho que esto podía ocurrir, pero esta es la primera vez que realmente hemos visto un evento de este tipo”, explica Dillon Dong, uno de los científicos que lideró la investigación.
La primera evidencia de este evento se registró en 2017, cuando los científicos examinaron las imágenes de VLASS y hallaron un objeto que emitía ondas de radio de forma brillante que no había aparecido en un estudio anterior del proyecto.
Ellos denominaron al objeto como VT 1210+4956 y determinaron que la brillante emisión de radio procedía de las afueras de una galaxia enana de formación estelar, situada a unos 480 millones de años luz de la Tierra.
“Todas las piezas de este rompecabezas encajan para contar esta increíble historia”, señalan los autores.
“Los restos de una estrella que explotó hace mucho tiempo se precipitó sobre su compañera, haciendo que esta también explotara”.