Nació como una startup en el seno de Silicon Valley pero hoy se ha consolidado como fabricante de coches eléctricos de lujo. Sí, nos referimos a Tesla Motors, marca que Elon Musk llevó al éxito tras ser fundada por un grupo de ingenieros en 2003 con el nombre de AC Propulsion. ¿Por qué adoptó el nombre del físico e ingeniero eléctrico de origen serbio Nikola Tesla? El primer prototipo desarrollado por esta compañía se basaba en corriente alterna, una clase de electricidad descubierta y desarrollada por él en 1882.
El descubrimiento de este tipo de electricidad desató la rivalidad entre Tesla y otro de los inventores más destacados del siglo XIX, Thomas Edison, –denominada “Guerra de las Corrientes”– quien abogaba por la corriente continua.
Pese a que su flamante firma debe el nombre a Tesla, no sería de extrañar que Elon Musk prefiriera a este científico frente a su gran rival Edison. Pero él mismo reconoció en una entrevista que es más fan del genio estadounidense. En ella explica el motivo, que no es otro que «Edison llevó sus productos al mercado e hizo que esos inventos fueran accesibles al mundo», mientras que Tesla «realmente no hizo eso», informa Tech Times.
Mientras que Musk se decanta por Edison como mejor científico de los dos, fue el sistema de corriente alterna de Tesla el que acabó imponiéndose después de una sucia batalla. Sin embargo, otros avances posteriores de Tesla no llegaron a plasmarse en realidades comerciales y terminó sus días en el olvido. Por el contrario, Edison se convirtió en un próspero millonario por otros inventos, por ejemplo, la bombilla.
Esa rivalidad entre los dos genios queda plasmada en la película Tesla, recién estrenada en Estados Unidos. El protagonista, Ethan Howke, interpreta a Nikola Tesla y está escrita y dirigida por el estadounidense Michael Almereyda. La cinta pone de relieve, una vez más, la complicada y extravagante personalidad del misterioso ingeniero.