El 15 de marzo de 1985 una compañía dedicada al equipamiento de sistemas informáticos para empresas tuvo el tino de anticipar la revolución que se avecinaba con el Internet y registró el dominio Symbolics. Era su forma de prepararse para una nueva era, digamos, poniéndose a la vanguardia. El hecho habría sido simplemente anecdótico para la empresa de no haber sido porque el registro constituyó uno de los puntos más relevantes en la historia de Internet: el registro de la primera .com.
Symbolics tuvo la visión de anticipar la revolución del Internet, que a la postre cambió los hábitos de compra-venta de productos tan mundanos como una pizza y permitió la formación de emporios del tamaño de Amazon, pero no puedo afianzar su negocio y terminó por declararse en quiebra en 1993. El descalabro financiero hizo que un tiburón de la red, Aron Meystedt, hiciera una oferta para comprar el dominio.
“Siempre supe que Symbolics fue la primera y más vieja .com, así que cuando tuve la oportunidad de comprarla no lo dudé”, contó en una entrevista al portal Logo. Meystedt encontró una forma de hacer dinero en la compra-venta de dominios, un negocio que todavía sigue teniendo adeptos que transforman cifras ridículas en varios millones de dólares.
Pese a que la compra-venta de dominios significó para Meystedt una forma de hacer dinero, la compra de Symbolics fue más bien simbólica, parte de un esfuerzo para conservar la historia del Internet. “Tengo un museo del Internet, decenas de miles de personas visitan Symbolics cada año, siempre me pareció un gran punto de partido” cuenta sobre esta reliquia que sigue estando al alcance de un clic como aquel 15 de marzo de 1985.
En la actualidad, Symbolics.com es un repositorio de varias lecturas alrededor de la historia del Internet, con explicaciones sobre cómo funciona la red, la creación de la World Wide Web y, de cara al futuro, la trascendencia de la tecnología de cadena de bloques que habilita a las criptomonedas como Bitcoin y su revolución financiera.
Lo cierto es que, por extravagante que parezca, la compra de Symbolics como una reliquia del Internet es apenas una de varias iniciativas para preservar en línea la historia de la red. Uno de los esfuerzos más conocidos es el Internet Archive, un repositorio en línea con miles de millones de archivos digitales, desde imágenes hasta las extintas animaciones Flash que dominaron el entretenimiento en la web a principios del siglo XXI.