Tener disponible en tu hogar lo mejor de la tecnología puede llegar a ser costoso, aunque para algunos valdrá la pena la inversión. Disfrutar de juegos y películas 4K en tu computadora es una experiencia increíble, pero necesitarás la tarjeta gráfica y el monitor adecuados.
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Lograr que tu sistema cumpla con las especificaciones para 4K no es tan sencillo como lo es para 1080p, o incluso 1440p. Sin embargo, no te preocupes, reunimos todo lo que necesitas para experimentar juegos y películas en 4K.
Una tarjeta gráfica potente es imprescindible
Los juegos en 4K requieren que tu tarjeta gráfica procese grandes cantidades de información en un abrir y cerrar de ojos, y para eso debes asegurarte que pueda cumplir todas las especificaciones necesarias.
Por fortuna, hoy día hay más tarjetas con capacidad 4K que nunca. Sin embargo, no es fácil comprar la mayoría de ellas. Las GPU están agotadas en todas partes, y si llegas a encontrar, tendrás que pagar precios muy por encima de los habituales.
No recomendamos comprar una tarjeta gráfica en este momento debido a los precios, pero si tienes suerte o estás decidido, aquí están nuestras recomendaciones.
La RTX 3080 de Nvidia está dirigida directamente a 4K, capaz de alcanzar 4K a 60 FPS en títulos como Assassin’s Creed Odyssey con la configuración máxima. Comparativamente, la 2080 Ti de última generación alcanza alrededor de 50 FPS en el mismo punto de referencia, todo mientras cuesta casi el doble que la 3080: $1,199 dólares.
Por ese precio, estás en la gama RTX 3080 Ti y RTX 3090, que es capaz de alcanzar los 8K con un poco de ayuda de DLSS. Sin embargo, por ahora, las RTX 3080 y 3090 siguen sin stock en casi todas partes.
Si estás dispuesto a renunciar a un poco de rendimiento y ahorrar algunos dólares en el proceso, las tarjetas de gama alta de la serie 20 de Nvidia son capaces de jugar en 4K. Según nuestras pruebas, las RTX 2060 Super y 2070 Super pueden ejecutar juegos como Fortnite y Civilization VI a 4K por encima de 60 FPS. Pero sufren en 4K con los títulos más exigentes, como el ya mencionado Assassin’s Creed Odyssey y Battlefield V.
La RTX 2080 Super y la 2080 Ti más caras son capaces de reproducir esos títulos más exigentes en 4K, aunque es posible que no alcance los 60 FPS de manera constante. La escasez de GPU también ha hecho que estas tarjetas sean difíciles de encontrar. Dicho esto, generalmente puedes encontrarlas por menos que sus contrapartes de la serie 30.
Si esperabas obtener una tarjeta AMD, tenemos malas noticias. Son tan difíciles de encontrar como las de Nvidia. Sin embargo, las recientes tarjetas gráficas RDNA 2 son capaces de jugar en 4K, con la RX 6800 XT a la cabeza de la línea.
Las tarjetas AMD de última generación fueron encabezadas por las Radeon RX 5700 y 5700 XT, y ambas son capaces de jugar en 4K, pero no hacen un gran trabajo en los juegos AAA modernos.
En nuestras pruebas, la 5700 XT de $400 dólares se ubica cómodamente entre la RTX 2060 Super y la 2070 Super de Nvidia en términos de rendimiento. Sin embargo, como todas las demás tarjetas gráficas en este momento, tienen un precio excesivo.
En cuanto a las computadoras portátiles, los juegos 4K siguen siendo bastante difíciles. Incluso las mejores laptops para juegos dan prioridad a resoluciones más bajas y velocidades de cuadro más altas
Aun los juegos en 4K son increíblemente exigentes para el hardware de escritorio y los chips gráficos de las laptops no tienden a estar a la altura. De todos modos, es poco probable que puedas apreciar realmente los detalles de 4K en una pantalla de computadora portátil de menos de 20 pulgadas.
Pero, si planeas alimentar tu monitor 4K con una computadora portátil para juegos, querrás comprar el sistema más poderoso que puedas encontrar, algo con como una Nvidia RTX 3080, si es posible.
Los procesadores y la memoria RAM no son tan importantes
Las computadoras para juegos suelen incluir un potente procesador y una memoria de alta velocidad, pero asumen un papel secundario detrás de la tarjeta gráfica cuando se ejecuta un sistema a 4K.
Son el hardware que le da a tu monstruosa tarjeta gráfica lo que necesita para mostrar juegos y ciertas aplicaciones con una resolución de 4K, por lo que deberás asegurarte de que no sean un cuello de botella.
Cuando se trata de seleccionar un procesador para emparejar con tu tarjeta gráfica, tienes que asegurarte que sea bastante reciente, aunque no es necesario que sea de gama alta. Si optas por un chip Intel, preferentemente que sea de las últimas generaciones (al menos uno de octava generación) y de la gama de procesadores Core i5, Core i7 o Core i9.
Si estás buscando procesador AMD, no elijas nada de Ryzen anterior a la primera generación y, preferiblemente, opta por la última serie Ryzen 3000 si tu presupuesto es limitado, o Ryzen 5000 si puedes disponer de un poco más, ya que ofrecen la mejor relación calidad-precio y el mayor rendimiento general.
En cuanto a la RAM, si bien las velocidades más rápidas pueden ayudar a aumentar la velocidad de fotogramas (especialmente en hardware AMD), asegúrate de tener suficiente para el sistema que estás ejecutando.
Escoger el monitor correcto
Por último, necesitarás un monitor 4K. Pero elegir uno hoy en día, no es tan simple como solía ser. Podrías gastar más de mil dólares en altas velocidades de actualización y tecnologías de sincronización, o un par de cientos, en una oferta más básica. Lo que elijas dependerá del presupuesto y de las exigencias que tengas en cuanto a las características y especificaciones.
Si planeas jugar en tu nueva pantalla 4K, las tasas de actualización más altas son útiles, pero a menos que te sobre el dinero, vas a tener problemas para impulsar los juegos en los 60 FPS más comunes. Todos nuestros monitores 4K favoritos están más orientados a la calidad de imagen que a un juego más rápido.
El tamaño es una consideración importante también. Si compras una pantalla demasiado pequeña, no podrás apreciar todos los detalles extra de píxeles. También hay algunos problemas de escala en ciertos juegos y software profesional.
Algunos te permiten escalar la interfaz, pero eso puede reducir la nitidez, que es la mitad de la razón por la que las personas compran monitores 4K en primer lugar. Creemos que si compras una pantalla 4K debes tener al menos 27 pulgadas.
Todavía no hemos hablado de la visualización de películas en 4K, y eso se debe a que no es tan exigente como los juegos. Aquí, sin embargo, la pantalla marca la diferencia. La compatibilidad con HDR es importante si estás principalmente interesado en ver películas y, aunque se prefieren frecuencias de actualización altas, no son esenciales.
Además, un panel IPS suele ser mejor para ver películas. Los paneles IPS no responden tanto como otros paneles, lo que en realidad no importa para ver películas, pero suelen tener colores precisos y amplios ángulos de visión.
Usar el puerto correcto
Con un monitor 4K listo para funcionar y una poderosa tarjeta de gráficos de poco valor, todo lo que necesitas hacer es conectarlos para disfrutar de tu nueva y hermosa configuración 4K. Sin embargo, la manera en cómo lo haces, puede tener un efecto drástico en tu experiencia.
La mayoría de las conexiones HDMI no pueden manejar 4K. El soporte para la resolución solo se introdujo en HDMI 1.4, pero incluso entonces, solo a un máximo de 30 FPS. Para usar una pantalla 4K de 60 Hz correctamente, necesitas HDMI 2.0, y eso está lejos de ser adecuado si estás ejecutando un monitor 4K de alta frecuencia de actualización.
Para respaldar eso, necesitarás usar un puerto DisplayPort 1.3 o 1.4, que admite hasta 120 Hz a una resolución de 4K.
El nuevo estándar HDMI 2.1 también es capaz de funcionar en 4K a 120 Hz e incluso 8K a 60 Hz. La adopción de HDMI 2.1 sigue siendo baja a mediados de 2021, aunque esperamos ver un aumento significativo el próximo año.
La tecnología 4K no es barata, pero eso está cambiando
La tendencia con toda la tecnología es que los precios tienden a caer a medida que más y más personas adoptan hardware más nuevo y los proveedores compiten por el aumento de la demanda.
Si bien, 4K todavía no es barato, generalmente puedes tener uno por alrededor de $1,000 dólares. Es una inversión considerable e incluso después de gastarla, el hardware a ese precio no te brindará una experiencia perfecta.
Ten cuidado con una buena oferta, ya que ciertos programas pueden tener problemas de renderizado. Si bien, tendrás una resolución nítida, es posible que pierdas la calidad de la velocidad de fotogramas. Algunos jugadores evitan el 4K porque una alta velocidad de fotogramas es esencial en una experiencia de juego de primer nivel.
Sin embargo, 4K puede valer la pena por la fantástica calidad de imagen. Pero debes esperar pagar por la alta calidad de imagen. Muchos juegos y películas tendrán nuevas formas de realismo, incluso aquellos anteriores al 4K.
4K es una tecnología prometedora. Comprueba los beneficios de obtener 4K, pero asegúrate que valga la pena el dinero que inviertes antes de tomar una decisión final.
