¿Estamos realmente seguros en esta era tecnológica? ¿La verdad? No todo lo que nos gustaría. WhatsApp, propiedad de Facebook, ha denunciado a la compañía israelí NSO Group por un hackeo o ataque masivo a la popular app de mensajería producido entre abril y mayo de 2019.
En concreto, WhatsApp alega que esta firma habría usado la app para espiar a un centenar de activistas, periodistas y otros miembros de la sociedad civil en todo el mundo. De hecho, este hackeo habría afectado a más de 1,400 usuarios de una veintena de países, entre los que se encontrarían México, Bahrein y Emiratos Árabes Unidos.
Carta en el Post
De hecho, ha sido el propio jefe de WhatsApp, Will Cathart, quien se ha encargado de difundir esta información en The Washington Post el 29 de octubre de 2019. El ejecutivo ha dejado claro que Facebook tomará acciones legales contra la compañía israelí por usar un fallo de seguridad o bug en la función de llamadas de WhatsApp. Tal y como explica Cathart, los usuarios afectados no tenían ni que descolgar o aceptar la llamada para ser infectados con spyware.
Pero advierte que, al final, los intentos de la compañía por cubrirse las espaldas y esconder el ataque han caído en un saco roto y advierte de los peligros de este tipo de acciones.
“Esto debería servir como una llamada de atención para las empresas de tecnología, los gobiernos y todos los usuarios de internet. Se está abusando de las herramientas que permiten la vigilancia de nuestras vidas privadas y la proliferación de esta tecnología en manos de empresas y gobiernos irresponsables nos pone a todos en riesgo. En WhatsApp, creemos que las personas tienen el derecho a la privacidad y que nadie más debería tener acceso a sus conversaciones privadas, ni siquiera nosotros”, añade Cathart.
La demanda contra NSO Group se presentó el 29 de octubre de 2019 ante un tribunal de EEUU, alegando que la firma israelí ha infringido las leyes del país y del estado de California, así como las condiciones del servicio de WhatsApp.