El nombre de Vivo suena cada vez con más fuerza en España. El fabricante chino acaba de presentar en el país su nuevo teléfono insignia para este año que llega no solo muy bien dotado, sino bajo el alero de ZEISS, el fabricante de lentes y material óptico que pone su sello en las cámaras del teléfono.
Si empezamos por el exterior del Vivo X60 Pro 5G, recuerda ligeramente al Vivo X51 con unas líneas redondeadas y unos marcos casi imperceptibles que abrazan su pantalla. El teléfono llega en dos colores: Midnight Black (con un peso de 177 gramos y grosor 7.59 mm) y Shimmer Blue (con un peso de 179 gramos y grosor de 7.69 mm). La leve diferencia de tamaño y peso entre modelos se debe al tratamiento de la pintura, pero en mano será apenas imperceptible.
La pantalla es una AMOLED de 6.56 pulgadas con resolución FullHD+ y tasa de actualización de 120 Hz que soporta contenido en HDR10+. De la potencia del teléfono se encarga un procesador Snapdragon 870 junto a 12 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento, sin bandeja para microSD. Su batería es de 4,200 mAh con carga rápida de 33 W y, por supuesto, ofrece conectividad 5G.
Quizá el punto fuerte de este dispositivo sea su cámara principal, una triple formada por un sensor principal de 48 megapixeles, un súper gran angular de 13 MP y un teobjetivo de 13 MP. Además, tiene una cámara frontal de 32 MP con funciones para selfies. La cámara ofrece el sistema gimbal para estabilización de imagen y según el fabricante permitirá obtener retratos nítidos con un bokeh muy natural y difuminado gracias a su software de recreación del icónico modo ZEISS Biotar.
El Vivo X60 Pro 5G llegará a finales de mayo en una sola versión de 12 GB y 256 GB por un precio de 799 euros, realmente ajustado para las prestaciones que —al menos sobre el papel— promete.