Después de que una de sus minivans autónomas estuvo involucrada en un accidente mientras operaba en la ciudad de Chandler, Arizona, Waymo aprovechó el evento de Google I/O para hablar de la tecnología de sus autos sin conductor, y explicar el rol de la inteligencia artificial (A.I.) en la conducción autónoma.
En una publicación que detalla los puntos incluidos en la nota de presentación durante el evento, el VP de Ingeniería de Waymo, Dmitri Dolgov, dijo que utilizan A.I. para “entrenar” a los vehículos autónomos para que puedan identificar su entorno, de una manera similar que hacen los conductores humanos.
En efecto, Google ya había estado realizando avances en el campo de la inteligencia artificial en otros proyectos, como la búsqueda de imágenes y el reconocimiento de voz. Pero tal vez no era un hecho conocido que los investigadores de I.A. de Google también ayudaron a darle a Waymo un impulso en el camino hacia autos verdaderamente autónomos.
“A medida que el aprendizaje profundo comenzó a despegar, nuestros ingenieros de tecnología autónoma trabajaron codo a codo con el equipo de Google Brain para aplicar redes profundas a nuestro sistema de detección de peatones”, explica Dolgov. “Incluso en aquellos primeros días, los resultados fueron notables, pues en cuestión de meses redujimos en 100 veces la tasa de error para la detección de peatones, haciendo que nuestro sistema sea más seguro y más capaz en la carretera”.
La necesidad de que los vehículos autónomos puedan clasificar con precisión lo que ven, se destacó trágicamente por un choque fatal que involucró a un automóvil autodirigido de Uber en Arizona. El 18 de marzo, el automóvil golpeó a la peatona Elaine Herzberg mientras empujaba una bicicleta por la calle de noche. Las investigaciones oficiales sobre el incidente no han concluido, pero un informe reciente señala que podría haberse ocasionado por una falla en el software en el que se basó el automóvil para tomar decisiones sobre cómo evitar obstáculos. Uber se negó a comentar sobre ese informe.
Waymo, que comenzó como un proyecto interno de automóviles autodirigidos de Google, antes de haberse convertido en una unidad separada, afirma que la inteligencia artificial es vital para ayudar a los autos sin conductor a tomar las decisiones correctas. La compañía explica que utiliza A.I. para entrenar sus autos, en situaciones como maniobras a través de zonas de construcción, moverse a un lao para vehículos de emergencia, y hacer espacio para otros autos que se detienen para estacionamiento paralelo.
Los ingenieros se apoyan en la infraestructura de Google, que incluye la red de centros de datos del gigante tecnológico, y los chips de unidades de procesamiento desarrollados por Google para probar modelos de aprendizaje automático.
Además de probar autos reales en las vías públicas, Waymo dice que maneja el equivalente a 25,000 autos por día en simulaciones por computadora. Los autos sin conductor Waymo superaron los 5 millones de millas en las vías públicas en febrero, y la compañía afirma haber completado 2.700 millones de millas simuladas el año pasado.
La próxima gran movida de Waymo será lanzar un servicio comercial de viajes compartidos autónomos en Arizona a finales de este año. En preparación para eso, la compañía está aumentando su flota de vehículos.