Debido al interés que Brianna había mostrado en la industria automotriz , General Motors le hizo una invitación muy especial: la posibilidad de conocer en primera persona la planta de ensamblaje de Arlington, Texas. Brianna tiene recién 18 años, y estudia en el Duncanville High School, establecimiento en el cual figura inscrita en la clase más grande de tecnología automotriz.
El recorrido por esta planta representará no sólo la gran oportunidad para ver cómo se construyen los vehículos, sino que además aprender sobre los diferentes tipos de trabajo que se realizan en estas instalaciones: la maquinaria usada, la tecnología necesaria, la ingeniería de la planta, etc.
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Se tratará de una experiencia 100% visual, observando las diversos momentos que se suceden en la creación de un vehículo: el ensamblaje general; la robótica, la soldadura y el proceso de pintura. También servirá para aprender sobre las distintas profesiones y oficios que participan en este proceso, incluyendo una cita con Norma González, Ingeniera Industrial de la sección de pintura, quien le explicará sobre su propia carrera personal, la cual empezó en GM siendo —justamente—una becaria.
Además de Norma, en el taller de carrocería, Brianna se reunió con Trena Cameron Burgan, y con Tomeika Atwater en la sección de Ensamblaje General.
De todo lo que vio y pudo conocer, para Brianna la zona favorita del recorrido fue, sin duda, el taller de carrocería. “Era muy interesante ver las piezas del coche en la línea de ensamblaje, dispuestas por separado, y poder ser testigo de cómo se iban uniendo entre sí para, poco a poco, ir formando un carro.”
Pero no sólo es un asunto de ensamblaje. La velocidad con que aquello sucede también es resulta llamativa: “Me sorprendió comprobar que un vehículo pueda ensamblarse en sesenta segundos. Además, yo no sabía cuántas personas se necesitan para construir un carro, ni por cuántas diferentes etapas debe este pasar”.
La visita ha sido del todo fructífera. Al menos, en lo que se refiere a las aspiraciones de Brianna. En el futuro, ella espera obtener su título de administración de empresas y trabajar en temas de producción. Es joven, y aún tiene mucho que aprender y que vivir. Pero no por ello muestra inseguridad: “Por el hecho de ser una chica, no debemos limitarnos, nunca. Somos capaces de hacer lo que queramos. Las posibilidades son ilimitadas”.
Muy bien por Brianna. Muy ien por las chicas que, como ella, saben que son capaces de conseguir lo que se propongan.