Los contratiempos continúan para Uber. Hoy la compañía anunció que retirará sus servicios de Dinamarca el próximo mes.
Esta decisión se debe principalmente a una ley que establece nuevos requisitos para los conductores de vehículos que ofrecen servicios similares a los de un taxi, que les obligaría a instalar sensores de asiento, taxímetros y cámaras de vigilancia, según informa Reuters.
Uber dijo en un comunicado que cerrará sus servicios en Dinamarca el 18 de abril debido a la nueva ley, afirmando que unos dos mil conductores daneses y más de trescientos mil pasajeros utilizan su aplicación.
«Para que podamos operar nuevamente en Dinamarca, los reglamentos propuestos deben cambiar. Continuaremos trabajando con el gobierno con la esperanza de que actualicen las regulaciones propuestas y permitan a los daneses disfrutar de los beneficios de tecnologías modernas como Uber», dijo un portavoz de la compañía.
Por su parte, el Ministro de Transporte de Dinamarca, Ole Birk Olesen, quien está a favor del funcionamiento de este tipo de servicios de transporte en su país, expresó su frustración en un comunicado. «Es una pena que no exista una mayoría en favor de la propuesta del gobierno de una liberalización significativa de la ley del taxi, lo que habría facilitado el funcionamiento legal de los servicios de Uber y otros similares en Dinamarca», dijo.
Uber no ha estado exento de una gran variedad de contratiempos y controversias durante los últimos meses. Hace ya un buen tiempo que la imagen de la compañía ha estado siendo golpeada por escándalos de todo tipo, incluyendo algunos graves episodios de acoso sexual.
Situaciones como esas, además de un video en el que se muestra al ahora ex-presidente de Uber perdiendo los estribos al hablar con un conductor, no hicieron más que poner en cuestionamiento las capacidades de liderazgo de Jeff Jones, quien recientemente dejó de formar parte de la compañía de San Francisco a menos de siete meses de haber asumido su cargo.
En el caso de Dinamarca, Uber mantendrá su división de desarrollo de software en Aarhus, en el norte de ese país, donde emplea a 40 personas trabajando en software de infraestructura, según el sitio web de la compañía, y dijo que asignará recursos para ayudar a los conductores daneses a través del proceso de cierre de operaciones.