Una completa investigación se destapó este domingo 10 de julio en el diario inglés The Guardian y compartidos al Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) junto a otros 42 medios asociados, se trata de cómo Uber ganó acceso a los líderes mundiales, se acercó a los oligarcas y esquivó los impuestos en medio de la caótica expansión global.
1- De qué se trata los Uber Files
«Los registros, los Uber Files, fueron obtenidos por el periódico The Guardian y compartidos con ICIJ y otros 42 socios de medios. El caché incluye correos electrónicos, mensajes de texto, presentaciones de compañías y otros documentos de 2013 a 2017, cuando Uber estaba irrumpiendo en las ciudades desafiando las leyes y regulaciones locales, esquivando impuestos y tratando de someter a la industria del taxi, más prominentemente, pero también a los activistas laborales», sostiene el reportaje de ICIJ.
2- La agresividad de Uber para entrar a los mercados
La estrategia consiste en penetrar en mercados nuevos sin la aprobación de gobiernos, expuso a sus conductores a la ira de los taxistas, quienes veían su fuente de ingresos amenazada por competidores que no estaban obligados a jugar bajo las mismas reglas. Tanto en Europa y Asia como en Sudamérica, los taxistas protestaron, acosaron a los clientes e incendiaron coches de conductores de Uber.
«Algunos ejecutivos de Uber trataron de sacar provecho de la violencia. Hablaron de enviar a la prensa los detalles de un apuñalamiento casi mortal y de otros ataques brutales con la esperanza de dar una mala imagen de los taxistas, según las comunicaciones. Directivos de Uber también buscaron desviar las cuestiones incómodas sobre sus estrategias agresivas de elusión fiscal, ayudando a los países a recolectar más impuestos sobre el ingreso de sus propios conductores», según los documentos.
3- Qué era el interruptor de emergencia
Ejecutivos de la compañía activaron un llamado “interruptor de emergencia” para cortar el acceso a los servidores de la empresa y evitar que las autoridades encuentren evidencias durante los allanamientos a las oficinas de Uber en por lo menos siete países, según los documentos filtrados y fuentes públicas.
4- Sus tentáculos políticos
Uber también reclutó a un batallón de ex funcionarios, incluyendo a varios ex asesores del presidente Barack Obama. Apelaron a funcionarios para cerrar carpetas de investigación, modificar cláusulas de derechos laborales, diseñar nuevas leyes sobre taxis, y alivianar la supervisión de antecedentes de los conductores.
Los archivos muestran que ejecutivos de Uber se reunieron con Macron, con el entonces primer ministro israelí Benjamín Netanyahu, la entonces primera ministra irlandesa Enda Kenny y el entonces presidente estoniano Toomas Hendrik Ilves, entre otros jefes de Estado.
Los ejecutivos de Uber cortejaban a oligarcas vinculados con el presidente ruso Vladimir Putin a través de exfuncionarios de Estados Unidos y el Reino Unido, y pactaron acuerdos especiales con ellos.
5-La violencia como arma
«Ejecutivos de Uber vieron la violencia y los ataques a los conductores como oportunidades estratégicas para generar apoyo para su causa. No asumieron ninguna responsabilidad por la violencia, a pesar de que el avance de Uber en nuevos mercados, a menudo en violación de las leyes locales, lo estaba desencadenando.
En 2015, los taxistas de Bruselas organizaron una campaña de acoso contra Uber. Lanzaron huevos a los autos de Uber, rompieron espejos retrovisores laterales y tomaron llaves de los conductores de Uber. Algunos incluso amenazaron con «lincharlos».
El gerente general de la compañía en Bélgica comentó: «Ya un conductor dio un paso adelante para hablar con la prensa: le arrojaron un saco lleno de harina sobre él y los pasajeros en taxi. Presentó cargos y un taxista habría pasado una noche en la cárcel: ¡> buena historia!»