El Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras (IIHS, por sus siglas en inglés) probó la efectividad de los sistemas de detección de peatones en 11 modelos de SUV compactas, con el objetivo de mostrar el potencial de dicha función en la prevención de accidentes.
Los defensores de la seguridad automotriz y los reguladores gubernamentales están luchando para enfrentar el creciente número de muertes de peatones, que ha aumentado en un 45 por ciento, desde su punto más bajo de 4,109 muertes en 2009 hasta los 5,977 en 2017.
Los sistemas de detección de peatones están siendo considerados como una importante medida para contrarrestar el problema, ya que la investigación también se centra en su uso en automóviles de conducción automática.
La tecnología utiliza cámaras frontales que están montadas cerca del espejo retrovisor, así como sensores de radar en la parrilla delantera, para explorar continuamente la carretera y el horizonte en busca de objetos en la trayectoria del vehículo.
Los algoritmos clasificarán si el objeto detectado es un peatón y determinarán si una colisión es inminente. Si es así, el sistema alertará al conductor y aplicará los frenos a una velocidad mucho mayor al tiempo de reacción de un humano.
La velocidad de desaceleración que logra este tipo de sistema es crucial para evitar muertes, según el gerente de pruebas de seguridad activa de IIHS, David Aylor. «Cuanta más velocidad reduzcas, más probable será que un peatón sobreviva al impacto», señaló.
El representante explicó que los sistemas reaccionan más rápido que los conductores porque «la tecnología siempre está prestando atención a la carretera y nunca se distrae ni adormece».
Pruebas exitosas
Para asegurarse de que los sistemas de detección de peatones funcionan como se anuncia, el IHSS realizó pruebas en un total de 11 SUV pequeñas que cuentan con esta función.
Las pruebas simularon tres escenarios comunes de accidentes con peatones: un adulto entrando a la calle por el lado derecho, un niño corriendo por la calle detrás de dos autos estacionados y un adulto caminando al borde de la carretera, dando la espalda al tráfico.
Los resultados fueron en su mayoría positivos, con nueve de los modelos de SUV modelos 2018 y 2019 exhibiendo un buen desempeño.
Cuatro SUV obtuvieron el nivel superior, la calificación más alta: Honda CR-V 2018-19, Subaru Forester 2019, Toyota RAV4 2019 y Volvo XC40 2019.
Otras cinco lograron un nivel avanzado: Chevrolet Equinox 2019, Hyundai Kona 2018-19, Kia Sportage 2019, Mazda CX-5 2018-2019 y Nissan Rogue 2019.
La Mitsubishi Outlander 2019, por su parte, recibió una calificación básica, mientras que la BMW X1 no obtuvo puntos, ya que su sistema no se frenó en una prueba y tuvo una reducción de velocidad mínima o nula en los otros.