Pequeños, tecnológicos, casi indetectables y te pueden multar a un kilómetro y medio de distancia.
Así son los radares de velocidad de última generación Trucam II de la empresa Tradesegur y que la Dirección General de Tráfico (DGT) de España se apronta a instalar en las carreteras ibéricas para “incentivar” a los conductores a respetar los límites de velocidad.
El diminuto, pero potente cinemómetro,mide 21 cm de largo, 9.8 cm de ancho, 31.7 cm de alto, y pesa solo 1.6 kg gracias a que parte de sus componentes son de aluminio.
Fue exhibido por primera vez en el Salón Internacional de la Movilidad Segura y Sostenible (Traffic) de 2019 y se estrenó, a modo de prueba, en julio de 2020 en una ubicación desconocida de la geografía española, informó Motorpasión.
El nuevo radar es capaz de detectar los excesos de velocidad a una distancia de entre 1,200 y 1,500 metros. Su distancia óptima para operar oscila entre los 15 y los 150 metros y puede tomar fotografías en alta definición de los autos que circulen por encima del límite de velocidad establecido y hasta los 320 km/h, con un margen de error de 2 km/h.
Trucam II puede capturar hasta tres imágenes por segundo, una cada 0.33 segundos, que pueden ser enviadas de forma instantánea a los agentes de tránsito vía Ethernet y wifi.
Además puede tomar fotografías del interior de los autos a fin de detectar otras infracciones de tráfico como el no uso del cinturón de seguridad o l utilización de teléfonos.
Asimismo puede vigilar las carreteras de forma ininterrumpida durante un intervalo de entre ocho y diez horas gracias a su batería de iones de litio, y funcionar a temperaturas comprendidas entre los -10ºC y los 60ºC (14ºF a 140ºF).
Incluso es capaz de discriminar los vehículos según su tipología: automóviles, vehículos comerciales, camiones…
La DGT actualmente opera también con radares de velocidad instalados en furgones, helicópteros y drones.