Por más de 20 años, el Corolla de Toyota ha sido el modelo más vendido del planeta. Desde su estreno en 1966, más de 45 millones de unidades han salido a la calle. A lo largo de 2018, temporada del lanzamiento de su 12° generación, casi 1.2 millón de nuevos ejemplares llegaron a manos de los consumidores.
En el primer tercio de esta temporada, el compacto ha comercializado casi 380 mil unidades, de acuerdo a las estimaciones efectuadas por la consultora especializada Focus2move. Solo en Estados Unidos, es el tercero más popular del constructor asiático. Entre enero y mayo, fue la décima variedad predilecta del público, con 123,999 ejemplares.
Pese a su popularidad, el Corolla no tuvo hasta la edición 2020 una versión amigable con el medio ambiente, específicamente híbrida, como sí lo había hecho la casa japonesa con los sedanes Camry y Avalon, y las SUV RAV4 y Highlander, así como con el elegante coupé LC, de su marca de lujo Lexus.
Aparecido esta primavera boreal únicamente como sedán, equipa el sistema Hybrid Synergy Drive de Toyota. En el caso del nivel de acabado LE, está integrado por un bloque de cuatro cilindros de 1.8 litro, que entrega 121 caballos y un torque de 105 lb-pie (142 Nm) desde las 3,600 rpm a las ruedas delanteras. Al unísono, trabaja un par de motores eléctricos que aportan otros 71 hp.
Entre sus puntos fuertes, se halla el rendimiento promedio de 52 millas por galón (22 kilómetros por litro), de acuerdo a la EPA. La cifra representa una ganancia de 30 mpg (casi 13 kpl) respecto de las plantas motrices convencionales de la familia. Su valor inicial base para Estados Unidos fue fijado en $22,950 dólares.
En esta nueva entrega semanal del programa MotorTech, analizamos a fondo el primer híbrido de la gama Corolla, que fue provisto del paquete de asistencias a la conducción Toyota Safety Sense 2.0 y el sistema de infoentretenimiento Entune 3.0, entre otros atractivos.