El largamente esperado sucesor del RX-8 probablemente adopte la placa RX-9, y al igual que todos los vehículos rotulados RX por Mazda, llegará con un motor rotativo de tipo Wankel. Los rumores indican que utilizará una unidad de doble rotor con una cilindrada de 1.6 litros equipado con un turbocompresor.
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Si los rumores son correctos, el RX-9 contará con el motor rotativo más avanzado nunca visto. Su desempeño será también mucho mejor. Este twin-rotor generará al menos 400 caballos de fuerza en su estado más básico, aunque en la balanza el RX-9 pesará tan sólo 2.866 libras. Y aunque las opciones de transmisión permanecen sin confirmar, la caja de cambios estaría montada sobre el eje trasero, ayudando así al coupé a conseguir una distribución de peso de 50/50.
El RX-9 no será simplemente una versión moderada del concepto RX-Vision (en la foto), el cual debutó el año pasado en Tokio. Fuentes informadas han puesto de manifiesto que el modelo de producción será mucho más corto que el RX-Vision, y su diseño se caracterizará por su forma angulosa en ambos extremos, dándole en general un aspecto más esculpido.
La revista japonesa Holiday Auto ha dicho que Mazda anticipará la presentación del RX-9 con un vehículo-concepto en la próxima edición del Salón del Automóvil de Tokio, a realizarse próximo año. El modelo de producción se presentará dos años más tarde, en el mismo evento, y se pondrá a la venta para el gran público un año más tarde, coincidiendo con el 100 aniversario de la compañía. ¿Los precios? Pues debieran comenzar en los ocho millones de yenes, unos $80,000 dólares al tipo de conversión actual.
