Es probable que hayas visto o escuchado acerca de los scooters o motonetas eléctricas de alquiler que han estado inundando algunas ciudades de los Estados Unidos, o probablemente hayas visto la cobertura de las noticias con respecto a algunas personas que corretean peligrosa e ilegalmente por las aceras y hasta chocan contra los peatones en bicicletas eléctricas. Pese a esto, estos vehículos gozan de gran popularidad por ofrecer una alternativa de transporte urbano. Sin embargo, no son perfectos.
Lyft ha retirado alrededor de 3,000 de sus bicicletas eléctricas de las calles de tres importantes ciudades estadounidenses, luego de una serie de quejas sobre un problema con los frenos de la rueda delantera de los vehículos asistidos por pedales.
Los servicios de las e-bikes son son operados por Citi Bike, Capital Bikeshare y Ford GoBike, en la ciudad de Nueva York, Washington DC y San Francisco, respectivamente, y los tres son supervisados por la compañía Motivate, una empresa líder en el mercado de bicicletas que Lyft adquirió por un monto reportado de $250 millones de dólares en julio del 2018.
«Recientemente recibimos una pequeña cantidad de informes de pilotos que experimentaron una fuerza de frenado más fuerte de lo esperado en la rueda delantera», señala Citi Bike a través de un comunicado en su sitio web. “Debido a una gran cantidad de precaución, estamos retirando de forma proactiva, por el momento, las bicicletas asistidas por pedales del servicio. Sabemos que esto es decepcionante para muchas personas que aman la experiencia actual, pero la fiabilidad y la seguridad son lo primero». Capital Bikeshare y Ford GoBike publicaron mensajes similares en sus sitios web.
En un esfuerzo por reducir la interrupción para los ciclistas que se acostumbraron a depender de estas e-bikes para su transporte, los tres servicios reemplazarán las e-bikes defectuosas con bicicletas regulares, es decir, a pedales y que no son eléctricas.
Pese a la popularidad -y controversia– de este tipo de transporte, lo cierto es que cuando se trata de la tecnología que alimenta a las bicicletas y scooters eléctricos, todavía existen algunos problemas que aún deben resolverse. Un claro ejemplo es lo que ocurrió con la empresa Lime (que también ofrece un servicio similar de la mano de Uber), que recientemente tuvo que advertir a las personas que tuvieran más cuidado al subir cuestas empinadas, después de informes de una falla de firmware que causaba frenazos excesivos y repentinos con algunos de sus scooters.
Ese problema de seguridad hizo que las autoridades de Auckland, Nueva Zelanda, retiraran los scooters de Lime de las calles de la ciudad durante varias semanas mientras la compañía resolvía el problema con una actualización de software.
Lyft, por su parte, parece dispuesto a resolver y prevenir problemas con sus bicicletas eléctricas tan pronto como sea posible. La compañía ha estado compitiendo con el rival de viajes compartidos Uber para ampliar sus servicios con la creación de soluciones de transporte integradas que permiten a los pasajeros combinar su uso entre automóviles, bicicletas y scooters para desplazarse por la ciudad.