Tras 80 años de silencio, el fabricante español Hispano Suiza reapareció en el Salón del Automóvil de Ginebra con un superdeportivo de lujo. Carmen lleva por nombre el vehículo totalmente eléctrico diseñado, desarrollado y fabricado en Barcelona.
En palabras de la compañía, el modelo representa “la máxima expresión de diseño de inspiración clásica, chasis de vanguardia y tecnología de tren motriz, potencia estimulante y dinámicas desarrolladas por expertos”.
Según la casa automotora, Carmen inaugura el segmento de vehículos de «hiperlujo», dado que combina el rendimiento de un hiperauto con una cuidada artesanía y un meticuloso foco en los detalles técnicos y de ingeniería.
¿Por qué su particular nombre femenino? Por Carmen Mateu (1936-2018), la madre de Miguel Suqué, el actual presidente de la firma y bisnieto de quien fundó la marca en 1904, Damià Mateu Bisa.
Creado desde cero, el biplaza Carmen cuenta con un tren motriz eléctrico que eroga una potencia máxima de 1,006 caballos de fuerza. Entre otras características técnicas, cuenta con suspensión delantera y trasera de doble brazo y un vector de par de torsión.
Con un rígido monocasco de fibra de carbono como base su peso de tan solo 3,726 libras (1,690 kilos) le permite alcanzar las 97 millas por hora (100 kmh) en menos de tres segundos y una velocidad máxima limitada electrónicamente de 155 mph (250 mph).
Sus líneas clásicas fueron rescatadas de los modelos que Hispano Suiza produjo a principios del siglo pasado, específicamente del H6C Dubonnet Xenia de 1938, del cual solo se produjo un ejemplar.
De sus claves de estilo, resaltan sus formas sinuosas, un frontal coronado por una parrilla trapezoidal, flanqueada a su vez por dos ostentosas tomas de aire, y sus ruedas traseras de 20 pulgadas cubiertas por el carenado.
Antes de impuestos, el Carmen tendrá un valor desde 1,5 millón de euros ($1,7 millón de dólares) y solo 19 unidades serán producidas entre finales de este año y 2021, anunció la empresa. Las pruebas en carretera tienen como fecha de inicio mediados de 2019.
El renacer de Hispano Suiza se gestó en 2000, cuando la familia Suqué Mateu firmó un acuerdo de transferencia de marca con Mazel Engineering. Producto de la alianza, surgió el prototipo HS21. Dos de sus evoluciones, denominadas K8 y HS21-GTS, fueron mostrados en público a principios del siglo, pero no fue hasta con Carmen que la compañía se tomó verdaderamente en serio el renacimiento.