Está programado que uno de los primeros Ford Mustangs construidos salga a subasta este próximo mes de abril en Indianápolis. Fabricado a principios de 1964, se trata de un Mustang histórico que, además, viene con un pasado inusual.
Ford decidió que los primeros Mustangs que salieran de las líneas de montaje de Dearborn, Michigan, serían enviados a distribuidores en Canadá, según ha contado la casa de subastas Mecum. Poner el mercado estos autos tomaba mucho tiempo en los años ’60, y los del óvalo azul querían siempre cerciorarse de que cada distribuidor tuviese —por lo menos— un ejemplar para así mostrar a clientes las capacidades del carro. De esta manera, un convertible con motor V8 y de número VIN 00001, más un coupé de techo rígido con VIN 00002, fueron enviados al país del norte como modelos año 1965.
Un error en el envío mandó inesperadamente al Mustang VIN 00002 a Whitehorse, una pequeña ciudad en medio del territorio canadiense de Yukon, en vez de Vancouver, ciudad a la que supuestamente debía llegar. No estuvo allí sino hasta el mes de mayo, y lo cierto es que estaba muy mal equipado para el duro clima y el terreno montañoso del norte de Canadá. Después de recibir un calentador de bloque de motor (para poder así afrontar las frías temperaturas de la zona), el número VIN 00002 sirvió como modelo de demostración del concesionario hasta encontrar finalmente un nuevo hogar, ya en la primavera de 1965. Desde entonces, pasó por no menos de 13 propietarios en Canadá y en los Estados Unidos hasta que Bob Fria, su dueño actual, lo compró en el sur de California en 1997.
El tiempo no había sido muy amable con el coupé. Afortunadamente, Fria reconoció su particularidad, y pasó dos años restaurándolo minuciosamente para devolverlo a su condición original. El trabajo duro y la dedicación dieron sus frutos, y a día de hoy, este Mustang está casi igual a cuando salió de Michigan, con cromados casi como espejos, y una pintura Caspian Blue brillante como el primer día. Incluso se exhibió en la sede de Ford cuando la compañía celebró sus 100 años, en 2003.
A mediados de los ’60, la definición de “rendimiento” era algo completamente diferente a lo que ahora conocemos. Mientras que un Mustang moderno lleva dentro de sí un V8 de 5.2 litros y 526 caballos de fuerza en su versión más notable, el ejemplar de 1964 que sale a subasta carga con un seis en línea de 2.8 litros, afinado para generar solamente 105 caballo de fuerza y 158 libra-pies de torque. ¿Y la transmisión automática de 10 velocidades que llega en el modelo 2018? ¡Olvídalo! Este veterano del ’64 viene equipado con una transmisión manual de sólo tres velocidades.
Mecum no ha proporcionado todavía una estimación del precio de la subasta, pero una publicación de Hemmings especula que se debiera vender entre los $450,000 y los $650,000 dólares.